Independentismo

La parte dura del BNG insiste en la vía soberanista

La UPG convoca su Congreso Nacional para “robustecer ideológicamente el nacionalismo” y ser útil a la “causa de la soberanía de Galicia”

Rego, secretario general de UPG, durante una intervención.
Rego, secretario general de UPG, durante una intervención. UPG

La causa es clara y los mensajes suelen reproducirse de modo recurrente, sin demasiado tiempo entre unos y otros, como si nadie quisiese dejar pasar la oportunidad de recordar, una y otra vez, para que está aquí la Unión del Pueblo Gallego (UPG).

La llamada parte dura del Bloque, la del nacionalismo más vinculado con la independencia, esa misma facción que, una vez pasada la campaña y pese al buen resultado de Ana Pontón -militante también de ese sector- no dudaba en recordar el camino: “Continuar dando pasos en la conquista de la hegemonía política en nuestro país en el camino de la soberanía”.

Un mensaje, el soberanista, que se repite como un mantra desde la UPG; una vez más en los últimos días, con motivo de la convocatoria del que será su XVI Congreso Nacional.

El evento, convocado para el próximo 7 de julio, coincidirá con el 60 aniversario de la fundación del partido, y para su desarrollo ya dejan claro, entre los objetivos del mismo, la voluntad tanto de “robustecer ideológicamente el nacionalismo” como de ser útiles a la “causa de la soberanía de Galicia”.

“Fortalecer el Partido desde el punto de vista político, ideológico y organizativo, de forma que sea una herramienta cada vez más útil a la clase trabajadora gallega e a la causa de la soberanía da Galicia”, subraya uno de los puntos en los que se desglosan las metas del Congreso.

Una cita, apuntan, que se configura como “una oportunidad” para “avanzar en la lucha que está trabando el nacionalismo por la hegemonía social en el camino de la soberanía”.

Y todo ello pese a que este mensaje soberanista desapareció del ideario del BNG durante la campaña del pasado mes de febrero. Una apuesta que tampoco figura, al menos por ahora, entre las prioridades públicas reconocidas por la líder nacionalista Ana Pontón. Algo distinto a lo que sucede en la UPG, donde su secretario general, Néstor Rego, es el único representante del Bloque en el Congreso.

Política belicista

En este marco, y más allá de la soberanía de Galicia, la UPG se marca como objetivos para este Congreso otra serie de puntos. Así, por ejemplo, apuestan por “definir las líneas de intervención más adecuadas para los próximos años, de modo que permitan colocar el movimiento nacionalista en un papel determinante en nuestro país”.

Sobre esta base, el ala dura del Bloque defiende la necesidad de realizar “análisis sobre la situación internacional y en el Estado, especialmente en un contexto de crisis social y económica e inestabilidad a consecuencia de la política belicista impulsada por el imperialismo”.

Y todo ello para crear “un debate necesario” sobre el mejor modo de “reactivar y mejorar la capacidad de intervención social y política del movimiento nacionalista gallego”.