Ni cerveza ni sangría: estas son las mejores bebidas para quitar la sed en verano

Es común que busquemos bebidas refrescantes para aliviar la sed y mantenernos hidratados. Sin embargo, no todas las opciones que nos parecen atractivas son las más adecuadas para cumplir este propósito. Bebidas como la cerveza o la sangría, aunque populares, no son las mejores aliadas para combatir la deshidratación.

Exploraremos alternativas más saludables y efectivas para mantenernos frescos y bien hidratados. Desde el agua en sus diversas presentaciones hasta infusiones frías y café, descubriremos por qué estas opciones son recomendadas por los expertos y cómo pueden ayudarnos a enfrentar las altas temperaturas de manera más saludable.

Agua: La elección indiscutible

El agua es, sin duda, la mejor opción para mantenernos hidratados, especialmente durante el verano. Los especialistas coinciden en que beber agua frecuentemente es esencial para asegurar una correcta hidratación. Además, las campañas de salud pública insisten en la importancia de su consumo durante las olas de calor.

El agua no solo sacia la sed, sino que también ayuda a regular la temperatura corporal y a mantener el buen funcionamiento de nuestros órganos. Para aquellos que buscan variar un poco, el agua con gas puede ser una alternativa interesante. Añadir rodajas de limón, naranja o incluso algunas hojas de menta puede hacer que el agua sea más atractiva y refrescante, sin perder sus beneficios hidratantes.

Infusiones frías y café: Alternativas refrescantes

Las infusiones frías se han convertido en una opción cada vez más popular para combatir el calor. Bebidas como el té verde con limón y hierbabuena, o el té oolong con cúrcuma y jengibre, no solo hidratan, sino que también aportan antioxidantes y otros beneficios para la salud.

Además, estas infusiones pueden prepararse fácilmente en casa, permitiendo controlar los ingredientes y evitar azúcares añadidos. Por otro lado, el café, especialmente en su versión fría, es una bebida que sorprendentemente también ayuda a la hidratación. Estudios recientes han demostrado que el consumo moderado de café no deshidrata, como se pensaba anteriormente, sino que puede ser una buena opción para mantenerse hidratado. Tomarlo a temperatura ambiente o caliente, como se hace en muchos países árabes, puede potenciar aún más sus efectos hidratantes.

Las bebidas alcohólicas, como la cerveza y la sangría, aunque populares en verano, no son recomendables para combatir la sed. El alcohol tiene un efecto diurético que puede contribuir a la deshidratación. En cambio, optar por agua, infusiones frías o café puede ser una estrategia más efectiva y saludable.

Preparar bebidas caseras como limonadas o granizados naturales, sin azúcares añadidos, puede ser una excelente manera de mantenerse fresco y bien hidratado. Incorporar ingredientes como frutas, especias y hierbas aromáticas no solo mejora el sabor, sino que también añade beneficios adicionales, como antioxidantes y una mayor sensación de frescor.