Gastronomía

Grandes de España: Juan Monteagudo o comerse Albacete km 0

En su cocina van de la mano, con elegancia, el recetario manchego y lo más delicioso de la despensa local

Juan Monteagudo
Juan MonteagudoLR

El talento joven hay que apoyarlo y fomentarlo. Por eso, por méritos propios y por lo atractivísimo que resulta el auge de la nueva cocina manchega, traemos aquí a este treintañero, que triunfa en su primer restaurante, Ababol (Albacete, una estrella Michelin). Hijo de un pintor francés con un pasado apasionante y de una madre médica con raíces hortelanas, Juan heredó lo mejor de los dos mundos. De su padre recibió la sensibilidad artística (que él ejecuta en cocina) y el amor por la caza. De la madre, la querencia por la tierra; no en vano, ella y sus hermanos tienen dos fincas que llevan en la familia cuatrocientos años, y de las que se surte el restaurante, que tiene un compromiso férreo con la sostenibilidad, la filosofía kilómetro cero y los proveedores locales. Su abuela le enamoró de los guisos de la tierra natal.

La de Monteagudo es una cocina en la que van de la mano, con elegancia, el recetario manchego y lo más delicioso de la despensa local (las verduras de secano son emblema de la casa) junto con técnicas y guiños franceses y una impronta vasca fruto de su formación, pues estudió en Artxanda (Bilbao). Abrió en enero de 2022 su restaurante y once meses después fue premiado con un macarron de la guide rouge. Poco después del primer aniversario de la apertura, se hizo con el premio del Concurso a la Mejor Croqueta de Jamón, uno de los certámenes más emblemáticos de Madrid Fusión. Tan bien le ha ido que hace poco inauguró su segundo local, La Bechamel, también en el centro de Albacete. Aquí ofrece sus galardonadas croquetas (antes eran un snack de los menús degustación en la casa madre) y ricos platos ideales para compartir. El chaval, siempre incansable y con mucha ambición de la buena, también tiene un corazón noble. El próximo miércoles, 30 de agosto, organiza una cena a cuatro manos con otros manchegos sublimes con estrella Michelin cuyos beneficios irán a parar a la Asociación Española Contra el Cáncer. No pierdan la vista a este JASP (Joven Aunque Sobradamente Preparado) albaceteño.