Cargando...
Sección patrocinada por

Trigésimo aniversario de la cuvée

La Maison Ayala presenta La Perle 2015, una nueva referencia de edición limitada

Se elabora con un 80% de Chardonnay Grand Crus de la Côte des Blancs y un 20% de Pinot Noir la Montagne de Reims

La Perle 2015 Balboa Comunicación

La Maison Ayala presenta La Perle 2015, una nueva referencia de edición limitada, definida como una obra de arte líquida que encarna la singularidad de un gran champagne de auténtica artesanía, cuidadosamente conservado y transmitido de generación en generación, desde la creación de la bodega en 1860.

Ayala Perle Perle se elabora con un 80% Chardonnay Grand Crus de la Côte des Blancs y 20% Pinot Noir la Montagne de Reims, procedentes de los mejores viñedos, seleccionados

por su gran potencial de envejecimiento.

La Perle 2015 marca el trigésimo aniversario de la cuvée. La añada 2015 se caracterizó por una dura sequía que, sin embargo, logró la maduración óptima de las uvas en los terroirs seleccionados. A través de procesos artesanales, y tras una crianza de más de ocho años con corcho natural, La Perle 2015 se convierte en un champagne extraordinario que presenta un perfil aromático complejo y un excelente potencial de envejecimiento del vino.

El diseño de la botella también es importante. En palabras de Hadrien Mouflard, director general de Maison Ayala: "La Perle se lanzó con la primera edición de esta cuvée en 1995 y

reproduce la forma original de la botella de Champagne Ayala, de cuerpo ancho, que favorece el contacto con las lías y es perfecta para el envejecimiento del vino”.

La Perle 2015 es un homenaje al saber hacer artesanal, con una cata excepcional, caracterizada por un sutil equilibrio entre frescura, complejidad y generosidad. “A la vista, presenta un dorado intenso y brillante, con burbujas delicadas. Ayala Perle 2015 revela una nariz compleja: aromas de pan tostado, tabaco suave y avellana, seguidos de notas de flores secas con un toque de eucalipto, característico de los Pinot de Aÿ. En boca, descubrimos notas de cítricos confitados, típicos de la Côte des Blancs pero que crean la sorpresa en una añada

tan cálida como la de 2015. La cata continúa con notas de cacao y frutos secos”, afirma Julian Gut, maestro de la Bodega de la Maison Ayala.