Gabriel Rufián, la historia del político que rompe corazones (amarillos)

Hace no mucho era conocido solo por ser el “indepe” agitador del Congreso. Sus salidas de tono y sus rifirrafes con los políticos de otros signos servían en bandeja los titulares más agresivos. Pero, casi de un día para otro, Gabriel Rufián cambió de estrategia. Rebajó su discurso y optó por un perfil más pacifista. Incluso su aspecto físico era más refinado. Con el paso atrás forzado de Oriol Junqueras, el que durante años fue su segundo se convirtió en la cara más visible de Esquerra Republicana en el ámbito nacional. Y coincidió, precisamente, con el momento de más tensión en Cataluña. Muchos se preguntaban el porqué de este cambio, pero no era fácil concluir que era un reflejo de su vida amorosa.

La pista la ha dado su ex pareja y madre de su hijo Biel. Mireia Varela rompió su silencio hace unos días en sus redes sociales para dar cuenta del “dolor” en el que está inmersa desde su ruptura con el político hace ya más de un año. “Despedí 2018 llorando sabiendo que perdía al amor de mi vida (...). He despedido 2019 llorando sabiendo que ya no podré recuperarle”, relata. “Lloro en este 2020 por perder al amor de mi vida, al que escogí como padre de mi hijo, a mi mejor amigo, a mi apoyo incondicional, a mi alma gemela, a mi amante fiel, a mi eterno defensor, a mi paciente protector, a mi infatigable luchador por mí, a mi sueño de familia ideal”, añade.

Ésta fue su primera publicación desde la ruptura. De hecho, la anterior corresponde a una imagen de Rufián con el hijo que ambos tienen en común colgada hace 50 semanas. Poco tiempo después firmaron un divorcio que ha supuesto un punto de inflexión en la vida de Varela. Estuvieron juntos en torno a una década. Juntos formaron una familia que completó el pequeño Biel, que cumplió ocho años el pasado 12 de octubre.

A todas luces, el tiempo no ha contribuido a curar las heridas de esta filóloga y especialista en Literatura Hispánica. No así las de él, que ya presume de nueva pareja. De hecho, lleva un tiempo haciéndolo. Rufián ha rehecho su vida al lado de la jefa de Prensa del Partido Nacionalista Vasco, Marta Pagola. Licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra, ocupa el cargo desde 2013, pero lleva vinculada al PNV desde 2008, cuando empezó a ejercer labores de asistente técnico.

Según su declaración de bienes y rentas (que es pública en la web del Congreso de los Diputados), Rufián percibe un salario de casi 86.000 euros por su trabajo como portavoz de ERC en la Cámara Baja. De acuerdo al mismo documento, posee el 50 por ciento de una vivienda desde 2018, un inmueble que presumiblemente habría adquirido junto a Varela.