Idilio

Enrique Solís,el «partidazo» que ha conquistado a Vicky Martín Berrocal (y su relación con Robert de Niro)

Emprendedor, empresario, aristócrata sin título y 17 años más joven. Así es el nuevo novio de la diseñadora sevillana

No he visto nada, me han pasado pero... La conozco de hace mucho tiempo, somos amigos la conozco hace muchos años, la verdad (...), estoy muy agobiado. (Vicky y yo) Nos conocemos de hace 10 años. (…) No he hablado con ella, ni siquiera sabía que estaba en la tele, o no sé dónde estaba, no tengo ni idea...» Es la callada por respuesta de manual interpretada en este caso por Enrique Solís al ser preguntado por Vicky Martín Berrocal. La periodista intentaba conseguir, sin éxito, la confirmación del romance que anunciaba la revista «Diez Minutos» este pasado miércoles en su portada. En vano. El hijo de Carmen Tello se salía por la tangente, pero las imágenes besándose en la fiesta de cumpleaños de un amigo en común eran más que evidentes. La llama del amor, al menos de la pasión, ha surgido.

Vicky Martín Berrocal
Vicky Martín BerrocalInstagram

Si Solís tiraba balones fuera, su nueva pareja lo pasaba peor. Se enteraba de la pillada en el plató de «TardeAR», donde trabaja como colaboradora. La encerrona fue de las que hacen época. Ana Rosa Quintana le ponía en pleno directo la portada de su «affaire», mientras Martín Berrocal no sabía donde esconderse. Su cara era un poema

Las fotos paseando de la mano pon en el foco a este joven empresario y aristócrata, considerado uno de los «solteros de oro» de la alta sociedad sevillana. Enrique es el hijo menor de Miguel Ángel de Solís-Beaumont y Martínez de Campos, marqués de la Motilla, y Carmen Tello, mujer del exmatador Curro Romero. Su pedigrí social no queda ahí. Su tía paterna es Matilde Solís, exmujer del duque de Alba y primo hermano del futuro duque de Alba, Fernando Fitz-James Stuart. Nació en Sevilla, tiene 34 años, 17 menos que Vicky, y es el menor de cuatro hermanos. Él es el único sin título nobiliario.

Carmen Tello / Foto: Manuel Olmedo
Carmen Tello / Foto: Manuel Olmedolarazon

Es lo que suele llamarse un «partidazo». Cursó estudios en Dirección y Administración de Empresas en el Centro Universitario Villanueva de Madrid, en el Berkley College de Nueva York y el European Business School de París. Su espíritu emprendedor le ha convertido en un empresario que se desenvuelve con soltura en negocios que van desde la moda hasta los hoteles.

Socio de Robert de Niro

Precisamente en este sector el sevillano culminó hace poco su proyecto más ambicioso de la mano de un socio sorprendente: el actor Robert de Niro. Se trata del Hotel Villa de Miraconcha, un inmueble localizado en el antiguo palacio Vista Eder, una mansión construida en 1912 por el arquitecto Francisco Urcola y situado en plena bahía de San Sebastián

Es el hotel preferido de Woody Allen, que rodó allí en 2020 escenas de «Rifkin’s Festival». Un emplazamiento privilegiado por el que Solís apostó fuerte desde el primer momento. El inmueble fue comprado por la socimi (sociedad de inversión inmobiliaria) Millenium Hospitality Real Estate, propiedad de Robert de Niro, pagando por él 10,5 millones de euros. Solís se hizo con el inmueble a través de un contrato de arrendamiento e inicio las obras del nuevo hotel, que encargó al interiorista Tomás Alía.

Entrevista con Enrique Solís.
Entrevista con Enrique Solís.Alberto R. RoldanLa Razón

La idea era realizar una reforma integral para convertir el inmueble en el quinto hotel de lujo de la ciudad. Pero se convirtió en una auténtica pesadilla. En parte por las denuncias de asociaciones como Áncora, que aseguraban que las obras del Nobu San Sebastián, el nombre con que sería bautizado, habían derribado trozos de la fachada protegida.Finalmente, el establecimiento consiguió salvar los inconvenientes y hoy tiene abiertas sus puertas. Él mismo anunció en sus redes la apertura de un Nobu en el centro de Sevilla, de lo que se sentía especialmente orgulloso como sevillano.

Mentalidad emprendedora

Solís figura como cargo activo en doce empresas. En algunas junto a sus hermanos, como One Shot, una cadena hotelera que hoy cuenta con más de diez hoteles en ciudades como Barcelona, Sevilla, Oporto o Madrid. Un negocio con pingües beneficios que la familia controla a través de la sociedad Oikos Hotels SL y que facturó 8 millones de euros en 2022. Además, participa a título individual en empresas como Global Vedelago SL, Wagyu Investments SL o Global Kioto SL, sociedades de inversión a través de las que gestiona su participación en diferentes holdings mobiliarios.