Casa Real
Sofía, una «influencer» en la Casa Real
El próximo lunes la benjamina de los Reyes, una niña alegre, divertida, despierta y espontánea, cumple 12 años.
El próximo lunes la benjamina de los Reyes, una niña alegre, divertida, despierta y espontánea, cumple 12 años.
Sofía de Borbón Ortiz, Infanta de España y benjamina de los Reyes cumple el lunes 12 años, lo que la convierte ya en una preadolescente con todo lo que esa palabra implica: tener más independencia respecto a sus padres, el inicio de salidas con amigos y el comienzo de lo que se conoce popularmente como la «edad del pavo» con todos los problemas y particularidades que esa etapa de la vida conllevan. Quienes conocen más a fondo a la Infanta dicen de ella que es una joven alegre, divertida, muy despierta y espontánea, que le cuesta poco relacionarse con sus compañeros del colegio Santa María de los Rosales y para la que es fácil crear buen ambiente entre los chicos y chicas de su edad que la rodean. Sofía es, como se dice ahora, más movida, le gusta participar en un montón de actividades que se desarrollan en las aulas y zonas de recreo del centro escolar en el que se educa y participa de forma entusiasta en muchas de ellas. Sigue con su afición al fútbol, que empezó desde que era muy pequeña, con lo que se suma a la corriente cada vez mayor de chicas que muestran su entusiasmo por un deporte que hasta hace muy poco era solo cosa de ellos. Pero, en contraste, también continúa con sus clases de ballet que ella y su hermana, la Princesa Leonor, dejaron durante un curso y que retomaron al siguiente. Hace un par de años, la hija pequeña de los Reyes se sumó al aprendizaje de un instrumento musical que se fomenta en el colegio de Los Rosales y se decantó, al igual que Leonor, por el violín, que ya va tocando con más soltura a pesar de las dificultades que entraña ese instrumento. Y participa en los conciertos que se organizan en el centro y a los que pueden asistir sus padres y otros familiares. Todas esas actividades, según las madres de algunas de sus compañeras, no inciden en el carácter responsable y cumplidor de Sofía, a quien no se le ocurre ir a clase sin hacer los deberes que les ponen sus profesores cada día. Es una persona trabajadora que sabe que, por ser hija de quien es, sus obligaciones son ineludibles, ya que así se lo han enseñado sus padres, especialmente su madre, la Reina. Por cierto, que este año Doña Letizia no estará junto a ella el día de su cumpleaños porque tiene que viajar a Mozambique para apoyar la labor de la Cooperación Española en el país africano, devastado a mediados de marzo por el paso de un violento ciclón que ha dejado muchas víctimas y destruido miles de casas y poblados.
Distinto estilo
La última aparición pública de la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía el pasado Domingo de Pascua ha proyectado una imagen muy diferente de las dos hermanas. Mientras que la primogénita de los Reyes aparecía con una indumentaria más formal –un vestido azul con un abrigo color crema encima–, la Infanta Sofía vestía de manera más informal –pantalón azul marino y un top en tonos azules– a diferencia de otras ocasiones en las que vestían de forma muy similar aunque con toques diferentes. Lo cierto es que la ropa que llevaba la Infanta Sofía le daba una imagen estilosa, más moderna que la de su hermana, a la que adelanta en estatura desde hace tiempo, y cuyo carácter dulce y reposado le proporciona un aire más aniñado e infantil a pesar de que es un año y medio mayor que Sofía. Quienes las conocen de cerca aseguran que son muy distintas de carácter e incluso se atreven a afirmar que mientras que la sucesora al trono se parece mucho a su padre, la pequeña es calcada en forma de ser a su madre.
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