La Pontificia se abre a la América Hispana la empresa y la sociedad civil

SALAMANCA- Fortalecer aún más los lazos con la América Hispana. Abrirse a la sociedad civil y escuchar al mundo de la empresa para acercarla a la universidad y ofrecer un horizonte real a quienes se forman en ella. Esos los principales objetivos del nuevo rector de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA). Pero hay más. Ángel Galindo, un segoviano emprendedor, que ha dado pruebas de su capacidad y buen hacer en muchos sitios, está decidido también a prestar mayor atención a la investigación y el desarrollo y, sobre todo, a escuchar a todos. La Universidad Pontificia de Salamanca tiene unos lazos muy fuertes con la América Hispana.

En declaraciones de La Razón, Ángel Galindo asegura que el potencial y la responsabilidad con Iberoamérica es enorme. «Tenemos un máster de 400 alumnos en México, Panamá, Honduras y Argentina, así como acuerdos con las universidades católicas de toda Iberoamérica, que cuenta con un total de 1,2 millones de estudiantes», explica el rector. También se muestra partidario de «acercarnos más» a la América Hispana, ya que «nos vamos a poder enriquecer con estos países, muchos de ellos emergentes tanto en el ámbito económico, como en el científico, en el técnico o el humanístico». En cuanto a las nuevas titulaciones de la UPSA, su rector señala que el objetivo es «la potenciación y extensión» de las ya existentes. Asimismo, anuncia la puesta en marcha de alguna materia relacionada con Panamá y Puerto Rico. Además, indica que «estamos abriendo titulaciones que van en el marco de situaciones difíciles y precarias de la sociedad, como es un postgrado sobre la gerontología para ayudar al mundo de las personas mayores».

Salud y marco eclesiástico
La Salud es también una prioridad, así como otras en el marco eclesiástico, especialmente dirigidas a la América Hispana y el acercamiento de los estudiantes a la empresa. Al respecto, declara que las universidades «deben estar atentas para que la formación no se recargue en los intereses puramente industriales, sino que conserven los propios de estos centros, que es aportar la dimensión científica y humanística que sobre todo el mundo empresarial no tiene en esos momentos».

Asegura que «nuestra universidad está tomando la iniciativa, y hemos puesto en marcha un proyecto para buscar a aquellas empresas que puedan ser el lugar donde nuestros alumnos se puedan colocar y adquirir una profesión». «Las instituciones académicas tienen que ir a las empresas, no podemos esperar a que vengan». Insiste en que el futuro de la sociedad está en las familias y en el papel que juegan las ONGs y los voluntarios, y no en la Comisión o el Parlamento Europeo, ni en el G8 ni en el G20.

Apoyo a la privada
«Los gobernantes tienen que ayudar más a la universidad privada, eso sí controlado cómo y de que manera se destinan esos fondos», señala Ángel Galindo, convencido de que «la sociedad española necesita de las universidades católicas». En su opinión, las universidades públicas se deben llamar estatales, porque las universidades privadas también son públicas, y por ello reivindica el papel de «nuestras universidades», «porque son un eje fundamental para la formación de los futuros profesionales de España, y para conseguir una sociedad más avanzada».

Por otra parte, el rector de la UPSA señala que «sin los laicos, sería muy difícil evangelizar la sociedad. Los bautizados tienen un lugar muy importante dentro del ámbito de la sociedad pero como delegado de la jerarquía o de los sacerdotes o de los obispos, sino para cumplir su misión, ser buenos ciudadanos». Por este motivo, se muestra partidario de que un cristiano laico «tiene que luchar y esforzarse para transformar esta sociedad como lo está haciendo sobre todo a través de Cáritas, de Manos Unidas», aunque tienen que decirlo en «nombre de Jesús de Nazaret, como Pedro y Pablo hicieron cuando curaron al debilitado en la Puerta Hermosa de Jerusalén».

Escuela de postgrado
La UPSA apuesta por la modernización, investigación y calidad, y ya ha puesto en marcha la Escuela de Postgrado con la que intenta potenciar la innovación y la relación entre ciencia y técnica.

Galindo explica que estas materias «no tienen sentido si no están unidas al humanismo», y que se está potenciando la Agencia Interior de la Universidad, que tiene como objetivo coordinar todo los proyectos de investigación, desarrollo e innovación sobre todas las titulaciones que se desarrollan en la Universidad Pontificia de Salamanca.