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El Orgullo se redefine

El Orgullo de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales se redefine este año para que el evento, que congrega a un millón y medio de personas en Madrid entre el 30 de junio y el 4 de julio, cause el menor impacto urbano y social en el barrio de Chueca, sin renunciar a su carácter lúdico y festivo.

Así lo han puesto hoy de relieve en rueda de prensa los responsables de la Asociación de Empresarios y Profesionales para Gays y Lesbianas de Madrid y su Comunidad (AEGAL), el Colectivo Gay de Madrid (COGAM) y la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), organizadores del evento.

Para lograr un Orgullo más sostenible y seguro, se ha acordado un plan de medidas que pasa por distribuir los espacios y escenarios, minimizar el impacto de las actividades y acotar los días y horarios de la celebración, de tal forma que la mayor parte de los actos se concentran el fin de semana.

Así, las horas de programación se recortan un 24%, se reduce un 70% la superficie de ocupación de escenarios y barras en Chueca y se disminuye entre el 40 y el 50% la potencia en los equipos de sonido.

Además, se ha remodelado la programación, con un enfoque mucho más cultural y menos discotequero.

Este año, la Plaza de España se convierte en el nuevo escenario principal, donde tendrán lugar las actuaciones más destacadas el viernes 2 y el sábado 3 de julio, si bien la Plaza Vázquez de Mella, en el barrio de Chueca, seguirá siendo el espacio de acogida de los participantes en la celebración.

No obstante, esta plaza, hacia la que van dirigidas las principales objeciones del Ayuntamiento de Madrid, reduce la actividad de su escenario también a esos dos días.

En ella, además, los organizadores pretenden que se establezca un dispositivo de seguridad para impedir la entrada de botellas de vidrio que propicien el botellón, "principal causa de la imagen negativa de la fiesta", y pongan en peligro la seguridad, según el coordinador de AEGAL, Juan Carlos Alonso.

El presidente de la FELGTB, Antonio Poveda, ha advertido a las autoridades locales de que si no otorgan los permisos para celebrar actividades en esa plaza "nos vamos a encontrar con un gran botellódromo".

"No a renunciar a Chueca, un espacio que hemos convertido en el barrio de la diversidad", ha subrayado el presidente de la FELGTB, quien ha precisado que pocos organizadores de fiestas están haciendo el esfuerzo que ellos para reducir el impacto urbano y social.

A pesar de ello, hasta ahora, la respuesta del Ayuntamiento ha sido "marear la perdiz", aunque los organizadores tienen pendiente que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, del que Poveda ha destacado "su buen talante", les reciba.

Para minimizar al máximo el impacto en el barrio de Chueca, los organizadores han decidido retrasar una hora los ensayos, una hora y media las actividades del 31 de junio y del 4 de julio, que concluirán a las 23 horas; y media hora los actos del viernes 2 y sábado 3 de julio, que acabarán a las 2.30 horas.

Se suprime el escenario de la calle Liberad y el de la calle Pelayo será desmontable para garantizar el tráfico durante el día.

La manifestación estatal será el sábado 3 de julio y transcurrirá entre la Puerta de Alcalá y la Plaza de España.

Alonso ha recordado que el Orgullo de Madrid es la celebración lúdica reivindicativa más importante de Europa y una de las más importantes del mundo, cuyo impacto económico en la Comunidad de Madrid supera los 100 millones de euros.