Buenos Aires

La NASA prueba en la Antártida un traje espacial para Marte

La NASA ya ha probado un traje espacial que se podrá utilizar en Marte. En la búsqueda de un ambiente similar al del planeta rojo, la agencia espacial estadounidense se ha trasladado a la Antártida, donde los astronautas han puesto en práctica todo lo que harían en un supuesto viaje al planeta más parecido a la Tierra del Sistema Solar.

Ya existe un traje para pisar Marte, aunque no haya fecha para viajar hasta allí, ni se pueda vislumbrar cuándo ocurrirá. Sí está previsto que hacia la mitad de la década de 2030 una nave espacial pueda orbitar el planeta rojo. Mientras llega ese día, Un equipo de la NASA ha puesto a prueba un traje espacial en una base argentina en la Antártida, un entorno hostil en el que los expertos buscaban condiciones extremas parecidas a las que se pueden encontrar en Marte.

El nuevo traje se denomina NDX-1 y está diseñado por el ingeniero aeroespacial argentino Pablo de León. Durante la prueba, soportó temperaturas heladas y vientos de más de 75 kilómetros por hora. Además, los investigadores probaron técnicas para recolectar muestras terrestres en Marte.

"Esta es la primera vez que probamos el traje en un ambiente tan extremo y aislado, por lo que si algo salía mal, no era posible ir a una tienda cercana"y comprar un kit de reparación, según ha explicado De León al regreso de una expedición de una semana. El traje prototipo ha tenido un coste de 100.000 dólares, y para crearlo se han utilizado únicamente fondos de la NASA. Está elaborado con más de 350 materiales, e incluye keviar y fibras de carbono, que logran reducir el peso sin perder resistencia.

Durante la misión 'Marte en Marambio', que ha recibido ese nombre por la base militar y científica argentina, un equipo de científicos de la NASA simularon caminatas espaciales, realizaron ejercicios y recolectaron muestras mientas usaron el traje.

El creador del traje también lo ha probado, y ha reconocido que puede generar claustrofobia en cualquier persona por su casco y su micrófono interno para comunicarse con el mundo exterior. Los investigadores eligieron la base Marambio porque, comparada con otras bases antárticas, tenía un mejor acceso a tierra que permanece congelada gran parte del año.

La Antártida, ideal para realizar las pruebas
Este científico, que lidera el laboratorio de trajes especiales en la Universidad de Dakota del Norte en Estados Unidos, ha explicado que la Antártida es un lugar ideal para recolectar muestras, dado que es uno de los lugares con menor contaminación en la tierra, y dará pistas sobre el impacto del traje. "Martes es una mezcla de muchos ambientes diferentes: desiertos y temperaturas y vientos como en la Antártida", ha explicado De León.

"Tratamos de tomar pequeños pedazos de lugares distintos y tratamos de ver si nuestros sistemas pueden soportar los rigores de Marte en caso de que vayamos", ha señalado.
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, aseguró el año pasado que para la mitad de la década de 2030 sería posible enviar astronautas a orbitar Marte y hacerlos regresar a salvo a la Tierra. Luego llegaría el aterrizaje sobre Marte, según señaló.

Pero una misión humana al planeta más parecido a la Tierra dentro del sistema Solar podría estar aún más distante por la reducción del presupuesto de la NASA. El Consejo de Investigación Nacional de Estados Unidos recomendó este mes que las misiones robóticas a Marte y a la luna Europa de Júpiter deberían ser prioridad en la lista de quehaceres de la agenda para la próxima década de exploración planetaria.

A pesar de esto, De León mantiene las esperanzas de que su traje espacial o tal vez una parte será usado por astronautas cuando den sus primeros pasos sobre Marte. "Aunque un tornillo de nuestro traje espacial o un pequeño pedazo de nuestro diseño llegue Marte, seré más que feliz", ha señalado.