¿Dónde se puede buscar ahora a María? Lo cierto es que el giro inesperado que dio ayer esta truculenta historia complica bastante la investigación de la Guardia Civil. Sin sospechoso principal, ni nota que indique qué pasó esa noche, los agentes tienen complicado dar con el paradero de la joven o, al menos, buscar en un lugar concreto más pistas.

De momento, y hasta que los análisis toxicológicos arrojen alguna luz, la prueba principal y la fuente de todas las pistas posibles es el coche de Javier, el Renault Modus que dejó abandonado tras sufrir el accidente y en el que se encontraron unas botas propiedad de la joven. Al parecer, María, que sabía que la noche con sus compañeros de trabajo se podía complicar y debía de calzar unos altos tacones, optó por curarse en salud y acudir a la cena con unas botas de repuesto por si el dolor de pies se hacía insoportable.

Esas botas estaban en el coche que todavía se está analizando y también se han buscado pistas en la casa del fallecido donde no hay rastros evidentes ni indicios que hagan pensar que la joven estuvo allí. Sí que se ha hallado una cazadora con rastros de sangre que concuerdan con el accidente con la radial que sufrió el joven el domingo en Mercadona.

El pasado miércoles al mediodía un ciclista se topó en un paraje de San Lorenzo de El Escorial con el cadáver de Javier. El joven decidió quitarse la vida y dejar la historia de la noche del pasado sábado en suspense. Hizo varias llamadas antes de tomar esta determinación y usó una cuerda de esparto para ahoracarse de una torre de alta tensión. Vestía un chándal y los investigadores creen que se desplazó hasta el lugar en transporte público.

El ciclista que se topó con la horrorosa estampa avisó a unos amigos y llamaron al 112. La Guardia Civil se acercó al lugar, pero no fue hasta por la tarde cuando el juez ordenó el levantamiento del cadáver. No llevaba documentación encima así que se identificó al hombre a través de las huellas dactilares.

Javier Sánchez era aficionado a la montaña y parece que su gusto por la naturaleza podría haberle ayudado a encontrar el lugar donde se quitó la vida, al parecer, el mismo martes. La familia del fallecido se encuentra desolada al igual que la de su ex pareja. Con la confesión a su padre de haber hecho algo «malo» y su posterior suicidio las opciones de encontrar a María con vida se desvanecen poco a poco.

Un trago muy amargo para una familia que mantenía la esperanza de que la historia diese un giro inesperado que devolviese a María de vuelta a casa con sus dos hijos. El menor, de ocho meses, también hijo del suicida.