Galicia

El PP bate récords en La Coruña

«Pokémon» también pasa factura al PSdeG en Lugo

La Razón
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MADRID- Los resultados en la principal provincia gallega, La Coruña, ratifican y amplían, como lo hicieron hace tres años, la confianza en Alberto Núñez Feijóo. El PP obtiene un escaño más de los que consiguiera en 2009 (13) gracias al 45,37% de los votos, que le dan la mayor distancia respecto al PSdeG en toda la Comunidad, sacándole 8 escaños de diferencia. En la capital, Santiago de Compostela, además, los populares también se hacen con la victoria, con un 43,36% de los votos. Por contra, el PSdeG confirmó los peores presagios en esta provincia y pierde tres escaños con respecto a 2009, en beneficio del PP, que le «roba» uno de sus escaños, y AGE, que le quita dos. Los socialistas con Francisco Caamaño al frente pierden un 12% de los votos con respecto a las elecciones precedentes y se quedan con el 18,67% de las papeletas y cinco escaños (tres menos que en 2009). El BNG pierde también fuerza y se adjudica sólo el 9,65% del sufragio, que le otorga por esta provincia 2 diputados, la mitad que en las anteriores autonómicas. La gran revelación es la coalición de Beiras (AGE) que con 96.008 votos obtiene cuatro diputados, convirtiéndose en la tercera fuerza política. Pendiente queda el escrutinio de los más de 9.300 votos por correo de los gallegos residentes en España que votaron la pasada semana.
En Lugo, la trama de corrupción que investiga la «operación Pokémon» pasa también factura a los socialistas, que pierden un escaño con respecto a las elecciones de 2009. Por su parte, el PP sigue imponiéndose con comodidad en esta provincia, al conseguir incluso un diputado más que hace tres años. Logra en estos comicios 9 diputados, y el 51,46% de los votos. Por otro lado, el BNG pierde un escaño que suma AGE.
 

Los socialistas pierden el8% de votos en Orense
La irrupción de la «operación Pokemon» en plena campaña electoral tiró por la borda cualquier esperanza que los socialistas tuvieran en uno de los únicos bastiones que resistió el descalabro socialista en las pasadas elecciones generales. Y tras la dimisión hace menos de un mes de Francisco Rodríguez como alcalde de la tercera ciudad más importante de Galicia por su presunta implicación en una trama de corrupción de cargos públicos en la concesión de servicios públicos, los resultados en esta provincia se esperaban de lo más importantes. Y no decepcionaron. A falta de sumar el voto de los «exiliados», los socialistas pierden casi un diez por ciento de apoyos, lo que les resta un diputado respecto a 2009, en detrimento del PP, que lo suma –ya tiene el doble, 8 por 4– y amplía mínimamente su porcentaje de seguimiento.
En la capital de provincia, donde el PSdeG tiene una importante militancia, sus resultados se han visto severamente castigados, seguramente influidos por la «operación Pokemon». Los socialistas han perdido un diez por ciento de los votos. Un duro golpe. El PP también pierde algunos puntos, aunque continúa siendo la fuerza más votada con diferencia. También cae el BNG y aumenta EU- ANOVA, que incluso supera y casi dobla a los nacionalistas, lo que ha sido una tónica general.
Porque el Bloque Nacionalista Gallego (BNG) perderá uno de los dos parlamentarios que tiene, tras caer en votos casi ocho puntos con respecto a los anteriores comicios. Se tienen que conformar con un escaso ocho por ciento de los sufragios.
Su pérdida la rentabiliza la coalición de Alternativa Galega de Esquerda con ANOVA, que obtiene un representante en la Xunta por Orense, al conseguir un porcentaje de apoyo total apenas medio punto menos que el obtenido por el BNG.
 

Pontevedra mantiene su apoyo al PP, pese a la entrada de los nacionalistas
Buena parte de los pontevedreses volvieron a confiar su voto al Partido Popular. En las elecciones celebradas ayer, la formación de Núñez Feijóo mantuvo el mismo número de diputados que en los pasados comicios, logrando 207.331 votos. Por su parte, los socialistas han obtenido peores resultados, ya que tan sólo consiguieron cinco escaños frente a los siete del 2009, hundiendo sus resultados en el feudo pontevedrés. La gran sorpresa de estos comicios fue la irrupción de la coalicción de Izquierda Unida y ANOVA (AGE) quienes destacaron por alzarse con 70.434 votos, lo que equivale a tres diputados. La formación de Xose Manuel Beirás, quien se desligó del BNG, consigue así adentrarse en el Parlamento gallego. En el caso de la ciudad de Pontevedra, el Bloque consiguió ser el partido más votado, eso sí, por detrás del PP, a pesar de la alcaldía de Lores. Otro de los partidos que se han visto perjudicados en estas elecciones ha sido el BNG ya que han pasado de tener cuatro escaños a disfrutar de tres. Por tanto, el partido independentista gallego, con el 11,94% de los votos, confirmó la pérdida de apoyo popular que viene sufriendo desde hace varios años. La abstención ha tenido también protagonismo en esta noche pues 279.403 lugareños decidieron no acudir a las urnas en esta jornada electoral. Además, el número de votos en blancos incrementó 1,2% si tenemos en cuenta las elecciones del 2009, aumentando también el número de votos nulos, pasando del 0,97% al 2,78% , lo que significa el aumento del 1,81%.