Hola qué semana

Tienen diez minutos y lecturas. Para empezar, «¡Hola!» nos sumerge en los glaciales del Ártico, que deben ser buenos para los excesos gastronómicos, alcohólicos y económicos propios de las pasadas fiestas. En lo económico, sobre todo, que se lo digan al cómodo matrimonio formado por Carmen Martínez Bordiú y José Campos, que son los protagonistas de la portada de la publicación. Nos cuentan que se han sumergido en aguas a 20 grados bajo cero, según Carmen, entre focas y la mirada de algún oso. Cualquiera con una pequeña maldad instalada en su cabeza podría pensar que el plantígrado de la mirada curiosa es el mismísimo José Campos, que encaja perfectamente en el apartado cariñoso de hombre oso, ya saben, grandes, peludos, cálidos y capaces de darte bocaditos. «Lecturas» va a lo que más beneficios le produce, su estrella exclusiva, Belén Esteban. Le colocan un biquini, la mandan a Punta Cana acompañada de hija, marido y amigos, pelotazo seguro. Portada y gran reportaje. Viéndolo se ve claramente que Fran las Navidades las ha vivido a tope, que se lo ha comido todo. Estas prácticas son letales si se tiene que poner uno un bañador inmediatamente. A Belén se le han puesto los pechos como dos grandes balones y además un poquitín de barriguita. Son datos suficientes para que se disparen los rumores sobre un posible embarazo. Cosa por otra parte muy razonable. Parece ser, presuntamente, que la Esteban en su última reconciliación con Fran le dio un ultimátum: «Elige, el bar o yo». El muchacho no se lo pensó, donde esté Belén que se quite cualquier bar, incluido el mismísimo «Harry» de Venecia, donde las copas cuestan 20 euros. «Semana» trae a portada a la Pataky y a su marido juntos, gracias a un montaje fotográfico. Curiosa pareja, al parecer se casaron y vendieron la exclusiva a «¡Hola!». La novia aparecía vestida como tal, pero sola, en ningún momento aparecieron juntos. Ahora van a la entrega de los Globos de Oro y cada uno va por su parte. Qué discreción matrimonial.