El mirador de Las Ramblas

Modernidad, dinamismo, confort, proximidad, luminosidad… hablo del Hotel Le Meridien de Las Ramblas, en Barcelona. Desde una de las habitaciones redondas en la cúspide del hotel se tiene una visión inesperada de La Rambla. A pie de calle piensas que este rincón de la ciudad es un paseo totalmente recto, pero cuando la contemplas desde las alturas ves que serpentea sinuosamente, enfatizando así ese movimiento infinito que le da vida, que la hace única. Desde las alturas te das cuenta de que La Rambla es el río que nos lleva a todos a alcanzar el mar. Nada más entrar en Le Meridien quedas sorprendido por el riesgo y la valentía del hotel al escoger al artista Joan Fontcuberta para decorar la entrada de la calle y el hall. Fontcuberta es uno de los videoartistas y fotógrafos más afilados del panorama español. Esta militancia con el video arte hace del hotel un sitio especial, ya que la cercanía con la vecina Galería de los Angels genera un diálogo muy fructífero entre el Arte y la calle.

Por otro lado, la Relaciones Públicas de Le Meridien, Ana Miquel, es una persona muy activa a la hora de generar diálogos entre el hotel y la calle. Ambos pertenecemos a la Fundació Tot Raval, encargada de la dinamización del barrio. Pocos hoteles hay en Barcelona tan incrustados en la vida real de la ciudad como Le Meridien.

Barcelona es la ciudad donde crecí, donde estudié y donde empecé a dar mis primeros pasos como artista. Me gusta esta ciudad, me gusta la calidad de vida que proporciona, pues no es ni demasiado tranquila ni demasiado agresiva. Si vives en la zona de La Rambla, como yo, prácticamente puedes ir caminando a cualquier sitio, o en un golpe de bici o en dos o tres paradas de metro. Estoy enamorado del Barrio Gótico y del Raval, que son las dos zonas que La Rambla separa como cuando Moisés separó el Mar Rojo, cada uno tiene su peculiaridad. El Gótico, que es donde está mi casa, tiene el encanto de la piedra antigua, de los callejones medievales, la Historia se respira en cada esquina. El Raval es nuestro «Le Marais», el barrio donde la gente joven se mezcla con la emigración, la zona más canalla de la ciudad.

Efectivamente, la zona de Las Ramblas tiene muchas carencias; aún así, no me iría a vivir a otra parte de la ciudad. Necesito la energía que tienen Las Ramblas, necesito su color y su gente, su ruido y su luz. Ir a comprar al mercado de la Boquería, merendar en Escribá, comer en el Pinocho o tomarse un café en el Lobo o cenar en el Carmelitas son sólo algunos de los pequeños grandes placeres que los habitantes del barrio saboreamos a diario.
 

>> Nombre. Le Meridien Barcelona.
>> Dónde. La Rambla, 111, Barcelona.
>> Lo mejor. La fusión con la gente y la ciudad.
>> Contacto: 93 318 62 00.