África

Trípoli

Detenida y violada durante dos días por hombres de Gadafi

Nadie sabe lo que ocurre en Trípoli, cerrada a cal y canto por el régimen. Sortear la censura es casi imposible, pero de vez en cuando hay pedazos de realidad que consiguen alcanzar a la prensa invitada a la capital por el propio Gobierno.

Un agente de Gadafi sujeta a una mujer que denunciaba su arresto y violación
Un agente de Gadafi sujeta a una mujer que denunciaba su arresto y violaciónlarazon

Ayer fue Iman el Obeidi, una mujer libia que irrumpió en un hotel de la capital donde se hospedan algunos reporteros internacionales, la que se atrevió a denunciar las barbaridades cometidas por los hombres de Gadafi. Llorando, temblando y enseñando sus heridas, Iman contó a los periodistas que había sido detenida en un puesto de control en Trípoli por las fuerzas de seguridad gubernamentales. Allí fue retenida durante dos días y violada por 15 hombres, según su relato que no pudo terminar porque fue silenciada por los propios empleados del hotel y por agentes del régimen, que se la llevaron a rastras a un coche de la seguridad del Estado antes de que pudiera desvelar más detalles sobre su historia.

Los agentes de seguridad también golpearon a aquellos periodistas que intentaban hablar con Iman, mientras la llevaban fuera del hotel, para escuchar sus palabras. Su relato ayuda a imaginar la realidad del régimen de Gadafi y sus 42 años de dictadura.

Los rebeldes también denuncian las barbaridades que supuestamente llevan a cabo los hombres del coronel. En un complejo gubernamental, donde el régimen cuidaba de sus colaboradores y disponía de un hangar para sus coches de lujo, los revolucionarios encontraron ropa interior femenina y esmalte de uñas, tal y como mostraron a LA RAZÓN, asegurando que Gadafi y sus allegados no dudaban en usar la violencia sexual como parte de su campaña de terror.

Entre los milicianos rebeldes en el frente también circulan algunos rumores sobre las atrocidades de las que son capaces los soldados contra los que luchan. Se dice que están dispuestos a violar «a todas nuestras mujeres». Pero ellas no tienen miedo de levantar la voz contra el régimen de Gadafi en las calles de la Libia libre.