Conflicto armado
ANÁLISIS: Prenderá la mecha por Alfonso MERLOS
- ¿Los incidentes en el Sáhara Occidental son aislados o pueden prolongarse?
–No deben leerse como el germen de una campaña sostenida inspirada por motivaciones políticas ni del lado marroquí ni del saharaui. Ni mucho menos como la mecha que pueda desembocar en un incendio en territorios de la antigua colonia española distintos al que ha sido sacudido en las últimas horas por los disturbios. Asistimos a un brote delictivo provocado por la percepción que miles de saharauis autóctonos tienen de los colonos, que se han instalado y han enraizado en Dajla. Es una forma esencialmente espontánea y desestructurada de manifestar el odio al otro, metabolizado ya en el ADN civil de las dos partes en conflicto.
-¿Hay interés por parte de alguno de los implicados en iniciar una escalada de hostilidades?
–El propio desarrollo de los acontecimientos demuestra que no. Ante el enfrentamiento provocado originariamente tras un partido de fútbol, tanto el régimen de Mohamed VI como el Polisario podrían haber explotado la oportunidad para desatar actos de violencia planificada si esa hubiese sido su voluntad. Marruecos no es partidario de calentar la región en el contexto de la enésima tentativa de presentar ante Naciones Unidas una hoja de ruta en busca de una solución negociada. En este marco, el brazo político y armado de los saharauis habría perdido legitimidad y credibilidad a los ojos de la comunidad internacional si hubiese hecho un llamamiento a hostigar al ocupante.
-¿Supone esto un obstáculo para el fin del conflicto?
–No tiene por qué. La resolución de la cuestión del Sáhara Occidental, más allá del estancamiento diplomático, ha entrado en una fase de putrefacción. No hay vías mutuamente aceptables; no hay iniciativas que convenzan; no hay un plan sobre el que avanzar de forma realista a uno y otro lado de la mesa. Y el resultado es una situación de inmovilismo y statu quo que está generando una fatiga mortecina para todos. La falaz posición de máximos del régimen alauí de considerar intocable su «soberanía y unidad territorial» hace inviable a corto plazo que se dé satisfacción al cumplimiento de la legalidad internacional.
Alfonso Merlos
Experto en Relaciones Internacionales