75 cumpleaños de la Reina

La madurez del Príncipe por Carmen ENRÍQUEZ

La Razón
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Predicar con el ejemplo. Eso es lo que va a hacer el Príncipe de Asturias hoy, día de su 44 cumpleaños. Porque si no es así, ¿de qué vale que el heredero de la Corona diga en sus discursos oficiales que la única manera de salir de estos malos tiempos que atraviesa España es trabajar duro y que cada español cumpla con su obligación?
Acompañado por la Princesa de Asturias, la persona que le ha dado estabilidad y le ha ayudado a centrar su vida, Don Felipe celebra hoy una fecha tan señalada con un recorrido por la isla del Hierro, asolada durante meses por temblores y la erupción de un volcán que han tenido con el corazón en un puño a los habitantes de la Restinga. Porque el Príncipe cree que por encima de celebrar su cumpleaños está su deseo de mostrar a los canarios del Hierro el interés de la Corona por sus preocupaciones y su futuro. Una forma inequívoca de practicar esa ejemplaridad imprescindible para cualquier miembro de su familia. Y también, que ser ejemplar no es una frase hecha compuesta por palabras que se lleva el viento, sino una norma que él trata de cumplir en sus 44 años de vida.