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Los frenos ABS en motos reducen un 20% las muertes

El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) ha defendido este jueves que se extienda el uso de frenos con sistema antibloqueo ABS en las motos, porque podrían evitar entre 70 y 100 muertes al año ya que reduce un 25% la distancia de frenado y evita caídas.

En una rueda de prensa, Lluis Puerto, jefe técnico de la Fundación RACC, ha señalado que aunque la seguridad del motociclista depende de gran medida de conductor y su formación, las mejoras de la tecnología en la moto, como este sistema, pueden incrementar su seguridad si se hace un buen uso, ya que este vehículo carece de carrocería y otros elementos de seguridad pasiva.

Algunos estudios aseguran que la probabilidad de tener un accidente en moto es 18 veces más que en un coche, y según las cifras que se han presentado, el número de muertos que hubo en España por accidente de moto en el 2009 fue de 437, además de 3.032 heridos graves y 15.733 leves entre conductores y pasajeros.

José María Riaño, secretario general de fabricantes e importadores de motos en España ha señalado que el frenado es el principal factor desencadenante de los accidente de motocicletas, y que aunque no es obligatorio usar ABS, las 22 empresas asociadas, que representan 42 marcas, promoverán su progresiva extensión para que en 2015 el 75% de las motos lo lleven integrado.

En España hay 2,7 millones de motocicletas y unos dos millones de ciclomotores, lo que suma un parque de casi cinco millones de vehículos susceptibles de usar este sistema de frenado, que cuesta entre 250 y 500 euros según el modelo, ha informado Lorenzo Giménez, responsable de Bosch de nuevas tecnologías, que es la firma que ha desarrollado este sistema de frenado.

También ha señalado que hay una propuesta de la Comisión Europea para que a partir del 2017 sea obligatorio este sistema ABS, que consiste en una bomba que se incorpora a los circuitos del líquido de freno y en unos sensores que controlan la revolución de las ruedas, que reduce la presión que se hace sobre los frenos en una frenada brusca y controla el giro de las ruedas.

Por parte de la administración, Ana Ferrer, subdirectora del Observatorio de Seguridad Vial, también ha apostado por el uso de esta tecnología, que es habitual en los coches y que ya llevan en Europa el 35% de las motos.

Miquel Nadal, Director de la Fundación RACC, ha remarcado que esta tecnología puede tener una gran incidencia sobre la siniestrabilidad y que, tras el casco, es el elemento que más puede contribuir a la seguridad de los motoristas.