Barcelona

Pujol y Mas denuncian «la guerra sucia» del tripartito contra CiU

«No podrán con nosotros», prometió Mas a su militancia durante la celebración del «Dia de CiU»

Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida ayer en Gurb (Barcelona) en la celebración del «Dia de CiU»
Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida ayer en Gurb (Barcelona) en la celebración del «Dia de CiU»larazon

BARCELONA-La crisis económica y las tiranteces en el seno del tripartito parecían haber convertido la campaña electoral de CiU en un tranquilo paseo de retorno a la Generalitat o, al menos, estos se desprendía de los resultados de las encuestas. Sin embargo, los últimos casos de corrupción destapados en Cataluña han complicado el tercer asalto del presidente de la federación, Artur Mas, al Govern. Pese a las dificultades añadidas, la federación nacionalista hizo ayer una exhibición de fuerza en su «Alderdi eguna» (día del partido) particular. Los nacionalistas reunieron cerca de diez mil militantes en Gurb (Osona) en una jornada festiva, que acabó tomando un inesperado cáliz reivindicativo.La mecha la encendió el ex presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, quien denunció la «guerra sucia» del tripartito contra CiU. Los nacionalistas están convencidos de que los partidos de la Entesa usan la comisión de investigación sobre el «caso Palau» y la presunta financiación irregular de CDC para desgastar a la federación nacionalista en un contexto preelectoral.Pujol había permanecido en semi silencio después de que el juez Baltasar Garzón decretara la detención de sus dos hombres fuertes, Lluís Prenafeta y Macià Alavedra, por su implicación en el trama Pretoria. Sin embargo, ante toda su militancia, el ex presidente catalán descargó toda su artillería contra las maniobras del tripartito, que tachó de «recurso de la gente débil que tiene poca exigencia moral». El ex presidente de la Generalitat recordó que, en los noventa, CiU se opuso a abrir una comisión de investigación en Madrid sobre los casos de corrupción del «PSOE del Gal, de Luis Roldán y de Mariano Rubio» porque no sólo suponía hacer daño a los socialistas «sino también al país». Una actitud que exigió para el tripartito. Pujol denunció, además, la campaña de «ridiculización» de Mas llevada a cabo por los socialistas catalanes. El actual líder de la federación compareció ante sus correligionarios con una consigna clara: «No podrán con nosotros». Mas prometió que no se amilanará ante los «obstáculos» que le plante el tripartito y avisó que «las ganas de cambio» de los catalanes se impondrán. En la misma línea se expresó el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, que en una entrevista a Europa Press se mostró convencido de que la única intención que persigue el PSC es «embrutecer» la campaña electoral.