Puebla

Cuarenta cardenales y obispos elevan hoy a los altares a Palafox en El Burgo

El Episcopado de Iberoamérica y las autoridades de México se vuelcan en el acontecimiento.

Angelo Amato, Gerardo Melgar, Gabriel Á. Rodríguez, Ildefonso Moriones y Claudio Iobine, en la capilla de Palafox
Angelo Amato, Gerardo Melgar, Gabriel Á. Rodríguez, Ildefonso Moriones y Claudio Iobine, en la capilla de Palafoxlarazon

El Burgo de Osma- Tras casi cuatro siglos de espera, el navarro Juan de Palafox y Mendoza, obispo de la Diócesis de Osma-Soria durante los seis últimos años de su vida (1653-1659) y Virrey de Nueva España (México) será hoy elevado a los altares de la gloria, en la Catedral de La Asunción de la localidad soriana de El Burgo de Osma, que se vestirá de gala para la ocasión.
No en vano, la torre barroca del templo volverá a relucir en todo su esplendor con una nueva campana fundida en bronce, que sustituye a la que se cayera el pasado mes de agosto poco antes de la procesión en honor al patrono de Osma, San Pedro de Osma, y que a punto estuvo de costar una tragedia. En la campana, que ha recuperado su antigua forma romana, y como homenaje al futuro beato, puede leerse la inscripción «Virgen del Espino, patrona burgi oxomensis saneta, MDCCCLXXIII (1773) y refundida en MMXI (2011), año de la beatificación de Juan de Palafox».
El Virrey será beatificado ante más de tres mil fieles y devotos procedentes de toda España y de la América hispana, principalmente, que no han querido perderse este histórico acontecimiento religioso y social, en torno a un hombre cuya vida y milagros no ha pasado desapercibida. Entre los asistentes, cuarenta obispos. Entre ellos cinco cardenales, como Antonio Cañizares, prefecto de la Congregación vaticana para el Culto Divino y la Disciplina de los sacramentos; Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal; Norberto Rivera, arzobispo de Ciudad de México; y Carlos Amigo, arzobispo Emérito de Sevilla.
Junto a ellos, estarán también el Nuncio de Su Santidad en España, Monseñor Renzo Fratini, cinco arzobispos y veintidós obispos más españoles que concelebrarán la ceremonia junto al Legado Papal, el Cardenal Angelo Amato, que leerá la Carta Apostólica en la que el Papa Benedicto XVI inscribe a Juan de Palafox y Mendoza en el Libro de los Beatos, en el que figura también el Papa Juan Pablo II, recientemente beatificado.
El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, con su obispo auxiliar, Eugenio Lira Rugarcía, completan la asistencia religiosa procedente de México junto con alrededor de doscientos sacerdotes mexicanos y españoles, a los que recibirá el obispo anfitrión, Gerardo Melgar. Respecto a las autoridades civiles, en la Catedral estarán también el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. Acudirán a El Burgo de Osma el vicepresidente segundo del Congreso, Juan José Lucas; el vicepresidente tercero del Congreso, Jorge Fernández Díaz; el presidente de Navarra, Miguel Sanz; y diversas autoridades civiles de México, sobre todo de Puebla. Los vecinos de El Burgo de Oma llevan meses esperando este momento que trasciende el ámbito eclesial, pues Palafox (obispo, Virrey, Capitán General, escritor fecundo, defensor de los pobres...) «tiene una personalidad tan apabullante que a pocos deja indiferente y a muchos llama al asombro y, ojalá, a la imitación de sus heróicas virtudes». Así lo explicó a este periódico el cardenal arzobispo de México DF, Norberto Rivera.

Sencillez y cercanía
De Juan de Palafox y Mendoza se ha hablado y escrito mucho. De su personalidad, destacan su sencillez y cercanía con los más necesitados, pese a sus raíces aristocráticas. Pobre y humilde. Caritativo y penitente. Estudioso y limosnero. Apóstol infatigable y santo de Jesucristo. También han destacado su amor a Dios y su estilo de vida salpicado de contrastes, lleno de mensajes adelantados a su tiempo. Ha sido tildado de sindicalista, por su defensa de los derechos de los indios, y luchó como nadie contra la corrupción, lo que llevó muchos sinsabores. Su extensa y prolífica obra literaria, con más de 250 títulos, la mayoría teológicos e históricos, ha sido también objeto de profundos análisis.
Le han definido como un hombre de pluma fácil, cuyo objetivo era divulgativo y pedagógico, aunque no exento de originalidad. Además, gracias a su archivo particular se ha podido encontrar la copia original de la Recopilación de las Leyes de Indias, único texto no oficial que data de 1680 y que Palafox intentó sin éxito que imprimieran para su conocimiento social.


Fechas relevantes en la vida y milagros de Palafox
24-06-1600
Nace en Fitero (Navarra). Hijo ilegítimo de Jaime de Palafox y Rebolledo, más tarde segundo marqués de Ariza, y de Ana de Casanate.
1628-1629
Experimenta un cambio radical. Es ordenado sacerdote en abril de 1629 por Francisco de Mendoza, obispo de Plasencia.
1666
Siete años después de su muerte, su cuerpo es exhumado y aparece incorrupto. Comienza el proceso de beatificación.
29-11-1766
Se produce el milagro. Un sacerdote a punto de morir sana de su tuberculosis de repente al encomendarse al obispo Palafox.
27-03-2010
El Papa Benedicto XVI firma este día el decreto por el que se reconoce que Palafox reúne lo necesario para ser declarado beato.