Ciclismo

Rotterdam

La última pelea de Lance Armstrong

El corredor anuncia que se despide del Tour en esta edición n Repetirá su duelo con Contador del año pasado, aunque en esta ocasión en equipos diferentes, sin disimulo.

La última pelea de Lance Armstrong
La última pelea de Lance Armstronglarazon

Lance Armstrong sale de Rotterdam con siete Tours de adelanto, sólo cinco con Contador, pero la historia no da pedales. «Contador sale con cinco minutos de ventaja», asegura Samuel Sánchez. «En el cara a cara, ya sea en contrarreloj o en montaña, Alberto es el más fuerte y para mí el favorito número uno», añade el asturiano. El Tour es una pelea, la última, entre los dos antiguos compañeros. Porque Armstrong ya ha advertido de que el que empieza mañana es su último Tour. Las piernas pesan más que los años y el líder del RadioShack ya se acerca a los 40.

«Éste será mi último Tour», aseguró el estadounidense en Twitter el martes pasado. «Será una carrera, esperan tres grandes semanas», dijo. Ganar el Tour es la última misión de Lance, ya no tiene que guardar fuerzas. Después, sólo le espera el final, esta vez parece que definitivo, de su carrera deportiva.

A Contador le quedan muchas ediciones de la carrera francesa por delante. Y la de este año le sienta bien. La carrera francesa hace un homenaje al Tourmalet, que se asciende dos veces. En la decimosexta etapa llega al comienzo, antes de ascender el Peyrosourde, el Aspin y el Aubisque. En la etapa siguiente, con un día de descanso en medio, será el final de etapa. El Tour este año se decide en los Pirineos. Los Alpes llegan demasiado pronto.

Contador, que ha ganado las últimas cuatro grandes vueltas que ha disputado, se mantiene prudente. «Soy consciente de que se puede ganar el Tour, pero lo normal es no repetir victoria año tras año». Este año, el español tiene la oportunidad de ganar la carrera en dos ediciones consecutivas por primera vez. Las circunstancias han hecho que nunca haya podido defender sus triunfos en las grandes. Ganó el Tour en 2007 y la organización le impidió correr al año siguiente. Tiempo que aprovechó para ganar el Giro y la Vuelta, carreras a las que renunció la temporada pasada para volver a centrarse en el Tour.

Su única preocupación es que el equipo responda. «Siempre tenemos que asumir la responsabilidad y eso provoca mucho desgaste», asegura. Entre sus rivales destaca a Andy Schleck: «El año pasado estuvo a un nivel altísimo, y este año será muy peligroso». De Armstrong no dice nada. El año pasado eran «compañeros». Éste, rivales sin disimulo.


Las claves
ALPES: Llegan demasiado pronto, comienzan al final de la primera semana y servirán como preparativo para la batalla de los Pirineos.
PIRINEOS: El Tourmalet es la estrella de la carrera. Llegan en la semana decisiva. Terreno para que Contador tome diferencias.
CONTRARRELOJ: Sólo hay una larga, el penúltimo día, que debe servir para decidir la carrera. Y Arsmtrong ya no es tan fuerte.
PAVÉS: Aparece en la tercera etapa, con un tramo de la París-Roubaix. Puede desatar las primeras sorpresas.
VALVERDE: Sancionado, su ausencia cambia los planes del Caisse d'Epargne. «Buscaremos victorias de etapa», dice Unzúe.
SAMUEL SÁNCHEZ: Pretende mejorar el sexto puesto de su última participación. «Prefiero una etapa que el quinto puesto», dice su director.