Inflación

España no ha recibido todavía ningún producto japonés susceptible de análisis

España no ha recibido todavía ningún producto procedente de Japón susceptible de ser sometido a controles específicos para controlar la presencia de radiactividad.

Según ha informado hoy el Ministerio de Sanidad, España importa muy pocos productos alimentarios procedentes de Japón, y ha precisado que las importaciones de ese país no llegan al 0,01 por ciento del total de las importaciones anuales de alimentos de España y de que en su mayoría se trata de pescado congelado.


La ministra de Sanidad, Leire Pajín, ha calificado de "ínfima"la cantidad de productos alimentarios que llegan a España procedentes de Japón, y ha asegurado además que todos los barcos españoles o de la UE que faenan por la zona lo hacen fuera de la zona de riesgo que se ha decretado. Las partidas procedentes de Japón que hubieran salido hasta el 14 de marzo (fecha del terremoto) se someterán a los controles habituales previstos para la importación o introducción de productos en la UE, y las partidas que hayan salido después de esa fecha se someterán a un control físico para analizar los niveles de radiactividad.


España acordó reforzar esos controles sobre los alimentos procedentes de Japón tras el terremoto del pasado 14 de marzo y el accidente nuclear que causó en la central de Fukushima. Leire Pajín, en declaraciones a los periodistas en el Senado, ha trasladado a los ciudadanos un mensaje "de tranquilidad y de seguridad", ya que ya se han activado todos los mecanismos de prevención posibles y éstos son -ha dicho- "más contundentes"que los previstos por la propia Unión Europea.


La ministra, tras insistir en que todavía no ha llegado a España ningún producto alimentario susceptible de ser sometido a controles específicos de radiactividad, ha calculado que los primeros productos que han salido de Japón después del terremoto y del accidente nuclear comenzarán a llegar en unas dos semanas a España.


El 25 de marzo la Comisión Europea publicó un Reglamento para armonizar los controles en toda la UE e imponer a Japón el análisis previo de los alimentos o piensos que quiera enviar a la UE procedentes de la zona que rodea a la central nuclear de Fukushima. Japón, ha recordado el Ministerio de Sanidad, está obligado a controlar el 100 por cien de los productos de la zona que destina a la exportación.


A la llegada a puertos de la UE, la Comisión ha establecido un control aleatorio de un 10 por ciento de las partidas para comprobar la veracidad de los análisis realizados por las autoridades japonesas y ha recomendado realizar al menos un 20 por ciento de análisis para los productos que procedan de fuera de la zona de control reforzado.


En España se ha adoptado la decisión de multiplicar por cinco estos controles a los productos importados, ha precisado Sanidad, y ha detallado que esos controles se realizarán en los Puestos de Inspección Fronterizos (PIF) para los productos de origen animal, y en los Puntos Designados de Entrada (PED) para los productos de origen no animal (verduras, frutos secos, frutas, hortalizas, especias o salsas).


Los controles consisten en un control físico con toma de muestras para determinar el nivel de radiactividad al 50 por ciento de las partidas (frente al 10% recomendado por la UE) de los productos procedentes u originarios de Japón. Esas muestras se analizarán en el Centro Nacional de Sanidad Ambiental del Instituto de Salud Carlos III.


Además, se solicitara una determinación analítica de radiactividad, y la aceptación de los productos alimenticios se ajustará a lo establecido en los reglamentos EURATOM, en donde se establecen las tolerancias máximas para los productos alimenticios.En el caso de que se detectara en una muestra niveles de radiactividad superiores a los admitidos se rechazará la partida, ha advertido el Ministerio de Sanidad, y si se detectan niveles de radiación anormales se comunicará de manera urgente e inmediata a la Subdirección General de Sanidad Exterior para que lo comunique a la red de alerta europea.


En el momento en que algún país detecte niveles de radiación anormales se pasará a analizar el 100 por cien de estos productos. El Ministerio de anidad ha destacado que para que un alimento, con un índice de radiactividad superior al límite permitido, produzca daño, teniendo en cuenta los distintos niveles y las diferentes condiciones de las personas (niños, ancianos, enfermos, etc.), se deberían ingerir, por ejemplo, espinacas contaminadas con los niveles detectados en Japón diariamente durante un año.