Caso Madeja

Detenido un párroco en Castellón por tener 21000 archivos pedófilos

El cura de la parroquia de Vilafamés (Castellón) ha sido detenido y puesto en libertad después de que la Guardia Civil haya encontrado en su iglesia más de 21.000 archivos de pornografía infantil, según ha informado la Fiscalía Provincial.

El detenido, sacerdote de la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, fue detenido el pasado miércoles y ha sido puesto en libertad provisional hoy tras prestar declaración judicial. El párroco ha sido imputado por un delito de distribución de pornografía infantil y tiene la obligación de comparecer quincenalmente ante el juzgado.

Según un comunicado remitido por la Fiscalía, los archivos de contenido pedófilo encontrados por la Guardia Civil ocupan un espacio de 600 gigabytes. El religioso, que fue arrestado por el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, tiene 52 años y se hizo cargo de la parroquia hace quince, según han informado fuentes municipales. El fiscal había solicitado al juez su ingreso en prisión comunicada y sin fianza, pero la juez de guardia ha rechazado esta medida, por lo que el Ministerio Público interpondrá un recurso en contra de esta resolución.

El Obispado de la Diócesis Segorbe-Castellón ha decretado la suspensión cautelar en todos sus cargos y en el ejercicio del orden sacerdotal del cura de la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Vilafamés (Castellón). Asimismo, ha informado en un comunicado que "de ser cierta la imputación, es éste un hecho que nos duele profundamente, que lamentamos con sinceridad y que rechazamos sin paliativo alguno", pues -ha añadido- se trata de "un grave delito, no sólo en el Derecho Penal del Estado, sino que también está considerado como un delito muy grave en el Derecho Canónico de la Iglesia, reservado por ello a la Congregación para la Doctrina de la Fe".

Esta conducta, según el Obispado, "contradice el deber y el compromiso a la castidad de todo sacerdote católico y atenta contra la santidad del ministerio sacerdotal y la credibilidad del mismo". Igualmente, ha lamentado, "puede poner en entredicho, en muchos fieles, la fidelidad de la mayoría de nuestros sacerdotes". Por otra parte, la Diócesis ha mostrado su "disposición total"hacia los tribunales de justicia en el esclarecimiento de los hechos,
y a la vez ofrecerá al sacerdote imputado los medios necesarios para su "justa"defensa.

Así mismo, se explica en el comunicado que para evitar el "escándalo"de los fieles, a tenor del canon 1722 del Código de Derecho Canónico, el obispo diocesano, después de haber hablado con el interesado y con el Promotor de Justicia del Obispado, ha decretado la suspensión cautelar en todos sus cargos, así como en el ejercicio del orden sacerdotal. "Pedimos a todos los fieles católicos y a las personas de buena voluntad que la conducta de un sacerdote no lleve a la desconfianza en todos los demás, que trabajan por ser fieles al Don que han recibido de Dios", ha añadido el Obispado. El Obispado ha recordado que ayer recibió la noticia de la detención del sacerdote, quien, tras haber prestado declaración ante el juez, ha sido puesto en libertad provisional, con la obligación de comparecer ante el juzgado los días 1 y 15 de cada mes.