Interior presenta una base de datos de personas desaparecidas y cadáveres que arrancará en enero

MADRID- El próximo mes de enero todas las fuerzas de seguridad del Estado (nacionales y autonómicas) dispondrán de una base de datos de desaparecidos y cadáveres sin identificar para gestionar la investigación policial en cualquier caso de desaparición que se produzca en España.El sistema, pionero en Europa, permitirá introducir todo tipo de detalles de la persona desaparecida, desde tatuajes, prótesis, piercings, piezas dentales o radiografías, y cruzará los datos disponibles de todas las policías. Toda la información recogida será compatible con los datos disponibles en las bases de datos internacionales sobre desapariciones de cuerpos como Europol o Interpol. El protocolo establece varios plazos de revisión de la investigación. Si a los siete días no ha aparecido la persona desaparecida, se activa una alarma que recuerda a los agentes que la investigación sigue abierta. A los 15 días, salta otra alarma y la Policía Científica comienza a recabar datos más concretos (muestras de ADN, huellas dactilares indicadores biométricos, radiografías...).En el caso de que no se responda a las alertas, el sistema envía un mensaje automático a la instancia superior para comunicar que no se ha hecho nada.El secretario del Estado de Interior, Antonio Camacho, informó de que cada año desaparecen en España alrededor de 50 personas y destacó que la herramienta ofrecerá una mayor operatividad en los casos denominados de «riesgo limitado» o de «riesgo alto» (menores, individuos especialmente dependientes o en una situación de riesgo). En estas circunstancias se acelerará la búsqueda y se lanzará «una llamada» a la población y los medios de comunicación para que colaboren en este tipo de situaciones «especialmente complejas».Además, los ciudadanos dispondrán del teléfono 116000 para dar información sobre desapariciones de niños y jóvenes. Este teléfono será gestionado por una organización no gubernamental, que aún está por decidir.