Política

EE Uu

Nancy Pelosi acusa a Donald Trump de «soborno»

Un día después del testimonio de Bill Taylor, la presidenta del Congreso señala el cargo por el que se podría procesar al presidente de EE UU

La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, ayer valoró en rueda de prensa las primeras audiencias públicas del juicio político
La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, ayer valoró en rueda de prensa las primeras audiencias públicas del juicio políticoJ. Scott ApplewhiteAP

La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, aseguró hoy que las primeras comparencias públicas del proceso de investigación previo al «impeachment» habían sido «un éxito para conocer la verdad». Pelosi, explicó ante la prensa que, a su juicio, las comparecencias de los diplomáticos Bill Taylor y George Kent, «corroboran las pruebas de un soborno» en el caso de Ucrania. «El devastador testimonio corroboró las pruebas de un soborno descubiertas durante la investigación y confirmó que el presidente abusó de su poder y violó el juramento de su cargo al amenazar con retener la ayuda militar» remachó. Preguntada por a qué se refería con la palabra «soborno», Pelosi detalló que «a la concesión o retención de asistencia militar a cambio de una declaración pública (por parte de Ucrania) sobre una investigación falsa de las elecciones» estadounidenses en 2016 o del ex vicepresidente Joe Biden. «Eso es un soborno», reiteró.

Quizá nada resultó más demoledor que el testimonio de un Taylor que llegó a denunciar la existencia de una diplomacia paralela, una suerte de administración oficiosa, al margen de las instituciones, para lograr que el presidente de Ucrania diera una rueda de prensa en la que anunciara que la Fiscalía investigará al hijo de Joe Biden por presunta corrupción. En cuanto actuaciones de Trump la veterana demócrata considera evidente que de usar un país extranjero para ayudarle en su propios intereses electorales, que la Casa Blanca ha obstruido el acceso a la información y posiblemente congelado la ayuda militar y económica a Ucrania. Unas actuaciones que hacen que «Nixon parezca casi pequeño».

Pero los republicanos no parecen ni mucho menos impresionados. Así, el líder de la minoría en el Congreso, Kevin McCarthy, insistió ayer en que todo es un circo de obvias motivaciones políticas. A su juicio, nada de lo que escuchamos amerita un "impeachment". Por su parte, el presidente Donald Trump, siempre dispuesto a pelear con Pelosi, no tardó en recordarle sus propias reticencias respecto al juicio político. El presidente cargó contra los demócratas y advirtió a los electores de que la Cámara de Representantes está más centrada en «perseguirle» que en legislar para el ciudadano de a pie.

El juicio político que puede desembocar en el "impeachment" es ya una picadora de nombres. Este viernes le toca el turno a la ex embajadora de Estados Unidos en Ucrania Marie Yovanovitch, objetivo directo de los ataques de quienes la consideraban un obstáculo para sus planes. Hablará en público, delante de las cámaras, seguida por millones, en el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, la misma diplomática que siempre estuvo contra la vía paralela supuestamente creada por la Casa Blanca para influir en el recién elegido presidente Vladimir Zelenski.

Entre los enemigos declarados de Yovanovitch, que durante su comparecencia a puerta cerrada ya dijo que se había sentido desprotegida e inerme ante las conspiraciones orquestadas en su contra, estaban Rudy Giuliani, abogado personal del presidente, y Paul Manafort, jefe de la campaña electoral en 2016, convencido de que el Gobierno y la Fiscalía ucraniana jugaron un papel determinante frente al llamado "Rusiagate".