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La Policía chavista allana la sede de Voluntad Popular horas antes de la gran manifestación opositora

Leopoldo López, refugiado en la residencia del embajador español, rompe su silencio para pedir la movilización de los demócratas

Fuerzas de seguridad de Venezuela irrumpen en la sede del partido de Guaidó
El presidente del Parlamento y líder opositor venezolano Juan Guaidó habla con los medios de comunicación tras el asalto a la sede del partido Voluntad Popular en CaracasRayner PeñaEFE

Los venezolanos han vuelto a salir nuevamente a las calles este sábao en lo que se espera sean grandes manifestaciones a favor y en contra del Gobierno de Nicolás Maduro, al que una parte de la comunidad internacional considera ilegítimo. La convocatoria opositora se anunció hace un mes y, durante las últimas semanas, las fuerzas políticas contrarias al chavismo han animado a la población a participar en esta protesta, cuyo éxito, aseguran, "depende de todos".

El jefe del Parlamento, Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por casi sesenta países, lidera esta cruzada y en las últimas horas ha intensificado sus llamamientos a la calle, tras una protesta estudiantil que fue reprimida con gases lacrimógenos en Caracas.

Mientras, los intentos del chavismo por acallar a la oposición se han recrudecido. La noche del viernes un grupo de encapuchados con armas largas irrumpió en la sede de su partido, Voluntad Popular (VP), y cerca de 30 personas que estaban en su interior fueron golpeadas, robadas y amedrentadas, según declararon a periodistas activistas de la formación."Vamos a la calle a reencontrarnos juntos ejerciendo mayoría, exigiendo por la mayor reivindicación: Venezuela. Nuestra libertad siendo ejercida en la calle, el estar juntos unificando nuestras luchas e insistir hasta lograrlo, es la gran victoria de hoy", escribió Guaidó este sábado en su cuenta de la red social Twitter.

Leopoldo López, coordinador nacional del partido, se manifestó desde la residencia del embajador español en Caracas, donde permanece refugiado tras saltarse el arresto domiciliario al que fue condenado. Desde allí ha hecho un llamamiento, al igual que Juan Guaidó, a los venezolanos que viven en el país como a los que residen más allá de sus fronteras, a que “salgan a la calle a manifestar la voluntad de conquistar la libertad, de construir una mejor Venezuela, sabiendo que primero deben salir de la dictadura, despojar al dictador y comenzar a transitar hacia el sueño de la mejor Venezuela posible”, dijo en un comunicado.

No es la primera vez que atacan la sede de Voluntad Popular, López ha pedido que la respuesta se lleve a cabo de la misma forma que en anteriores ocasiones, con firmeza y templanza. López ha dicho que debe persistir la voluntad y la vocación entre los miembros de VP de enfrentar la dictadura. Desde la oposición tienen señalado en el calendario, desde hace semanas, el día de mañana como una fecha clave para convertir el cambio en Venezuela. Para ellos, la calle es su terreno de lucha, y los ciudadanos su principal arma.

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Por su parte, el oficialismo anunció su manifestación el pasado domingo y aseguró que defenderá la revolución en la calle, donde esperan encontrarse con la masa opositora "a ver qué pasa", o al menos así lo dijo entonces el dirigente Diosdado Cabello, primer vicepresidente del gobernante partido PSUV.

Cabello y portavoces del Gobierno también han animado a los chavistas a sumarse a sus manifestaciones este sábado y, para ello, han contado con la difusión de propaganda en todos los medios de comunicación públicos, a diferencia de Guaidó, que ha hecho su llamamiento casi exclusivamente a través de las redes sociales.

Las rutas anunciadas para ambas movilizaciones no coincidirán en ningún punto, aunque la oposición prevé concentrarse en dos sitios cercanos al municipio Libertador, un territorio que el chavismo considera su bastión y donde generalmente la fuerza pública dispersa las protestas antigubernamentales.

Entretanto, el servicio de transporte subterráneo de Caracas, el sistema más usado en la capital venezolana, anunció este sábado que no operará en las estaciones cercanas a los puntos de concentración del antichavismo, "motivado a trabajos", y sí en las zonas donde se manifestará el oficialismo. También hubo interrupción del suministro de combustible en muchos puntos.