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El “Ibizagate” se cobra las tres primeras detenciones

Arrestados dos hombres y una mujer acusados de chantajear al ex líder ultra austriaco Strache para no revelar el vídeo en el que ofrecía contratos públicos a cambio de financiación para su partido

Heinz-Christian Strache and his wife Philippa
El vicecanciller austriaco, el ultraderechista Heinz-Christian Strache, junto a su mujer PhilippaFelix Hörhager/dpaFelix Hörhager/dpa

El “Ibizagate”, el escándalo que involucra al ex líder de la ultraderecha y ex vicecanciller austriaco, Hans Christian Strache, se ha cobrado sus tres primeras detenciones.

El caso, que provocó la ruptura de la coalición de Gobierno entre el canciller Sebastian Kurz y el Partido Liberal (FPÖ), estalló al revelarse un vídeo en el que Strache ofrecía contratos públicos a cambio de financiación para su partido a una mujer que se le hizo creer que era la sobrina de un oligarca ruso, y sugería a su interlocutora que podría tomar el control del tabloide más grande de Austria. Dos periódicos alemanes publicaron en mayo extractos de las sensacionales imágenes de cámaras ocultas grabadas en 2017 en un apartamento de Ibiza.

El fiscal de Viena no reveló las identidades de los tres sospechosos, pero, según la prensa austriaca, dos hombres y una mujer son sospechosos de presunta extorsión de unos 400.000 euros. Su objetivo era exigir a Strache esta suma por prometer no distribuir el escandaloso vídeo. Los tres sospechosos estuvieron involucrados con un detective privado considerado por los investigadores como el “autor intelectual” detrás del asunto.

Los sospechosos se encuentran desde finales de noviembre en detención provisional, dos de ellos sospechosos de haber reclutado el “cebo”, y luego equipar la villa alquilada en Ibiza con cámaras.

Los investigadores todavía están tratando de identificar a la mujer en el vídeo que no se ve por completo en la cinta. Los autores de esta trampa intentaron durante casi dos años ganar dinero con el vídeo antes de que fuera revelado y acabara con la carrera política del líder ultraderechista.

Este escándalo precipitó la caída en desgracia de Strache, quien, tras las elecciones anticipadas del pasado 29 de septiembre, abandonó el FPÖ envuelto en un escándalo de malversación de fondos del partido denunciando una conspiración en su contra. La formación ultranacionalista pagó muy caro en las urnas la corrupción, al pasar del 26% al 16% de votos.