Londres

El último yihadista de Londres pidió a su novia que decapitase a sus padres

Sudesh Amman, de 20 años, había sido condenado en 2018 pero salió de prisión hace una semana después de cumplir la mitad de su condena

El atacante ha sido identificado como Sudesh Amman
El atacante ha sido identificado como Sudesh Ammanlarazon

Sudesh Amman, exconvicto de 20 años, y vecino de Harrow. Esta es la identidad que los medios británicos -y fuentes policiales aún no oficiales- atribuyen al yihadista abatido ayer en Londres después de apuñalar a tres personas.

Amman había sido encarcelado por difundir información y propaganda islamista violenta. También por haber animado a su novia a decapitar a sus padres. En noviembre de 2018 se declaró culpable de posesión de documentos y de difusión de publicaciones terroristas, y al mes siguiente fue sentenciado a más de tres años de prisión. Entonces tenía 17 años y vivía en casa con su madre y sus hermanos menores cuando comenzó a cometer delitos de terrorismo, según las autoridades.

La Policía tuvo conocimiento de sus actividades en abril de 2018 y un mes después fue arrestado por agentes armados en una calle del norte de Londres. Cuando los oficiales examinaron sus ordenadores y su teléfono, descubrieron que había descargado material sobre la fabricación de explosivos y la realización de ataques terroristas, según fuentes policiales.

Los mensajes mostraban que había compartido con su familia, amigos y novia sus puntos de vista extremistas y su deseo de llevar a cabo un ataque, a menudo centrado en usar un cuchillo, informó la Policía. En diciembre de 2017, Amman publicó una foto del entonces líder del Estado Islámico Abu Bakr al Baghdadi, quien fue asesinado durante una redada estadounidense en Siria el pasado mes de octubre, y le dijo a su hermano en un mensaje que “el Estado Islámico está aquí para quedarse”.

También describió a las mujeres yazidíes como esclavas y dijo que, según el Corán, se las podía violar. Los investigadores también informaron de que había compartido una revista digital de Al Qaeda con su familia y, en una discusión la escuela con un hermano, escribió que “preferiría hacerme explotar”.

Muy distinta es la imagen que da su madre, Haleema Faraz Khan, sobre Sudesh Amman. En declaraciones a Sky News, lo describió como un “niño amable y educado” y que ella habló con él unas horas antes del ataque. Haleema añadió que había visitado a su hijo en un albergue el jueves y que éste la llamó horas antes del ataque.

También confirmó que se radicalizó después de ver material islámico en la red y también durante su estancia en la prisión de Belmarsh (donde cumplía condena por delitos relacionados con el terrorismo). Khan reconoció que cuando escuchó la noticia de que había ocurrido un ataque, “tuve la sensación” de que Amman, el mayor de cuatro hermanos, era responsable porque estaba en el sur de Londres.

El debate del cumplimiento de las penas

La historia vuelve a repetirse. Un exconvicto o un terrorista vigilado por las Fuerzas de Seguridad ha sido capaz de atentar sin que nadie lo haya podido evirtar. El primer ministro, Boris Johnson, volvió hoy a insistir en que cambiará la legislación para que los terroristas cumplan sus condenas. Lo anunció tras el anterior ataque y hoy ha vuelto a insistir.

Por su parte, el alcalde de Londres, Sadiq Khan, se ha lamentado porque este atentado era “previsible” y “evitable”, porque el autor era una persona que estuvo en prisión y que suponía un riesgo para la seguridad ciudadana.

“¿Por qué se permitió que fuera liberado si las autoridades sabían que iba a ser un peligro?”, ha planteado el primer edil de Londres en referencia a Sudesh Amman, que salió de prisión hace una semana tras haber cumplido la mitad de la pena a la que fue condenado por delitos de terrorismo y que estaba incluido en una lista de vigilancia policial por el riesgo que representaba.

Khan ha afirmado que el atentado de este domingo era “previsible” y “evitable”, al igual que lo fue el ataque en el que supuesto yihadista acabó con la vida de dos personas a puñaladas el 29 de noviembre de 2019 en el Puente de Londres. En ese caso, el autor del ataque también había cumplido pena de prisión por delitos de terrorismo.

“Quiero estar tranquilo en el sentido de que las autoridades tienen los recursos y el apoyo que necesitan para garantizar que estamos seguros”, ha explicado el alcalde. Khan ha criticado los últimos cambios legales aprobados por el Gobierno por entender que han provocado que la ciudadanía británica esté “menos segura” al no contar los jueces con los recursos para mantener en prisión a los delincuentes peligrosos.

"Este Gobierno cambió las leyes hace unos años para hacer más difícil para los jueces que dicten la sentencia justa y hemos tenido ejemplos de personas que se han radicalizado en prisión", ha afirmado el alcalde de Londres.

El primer edil laborista ha dicho que presionará al Ejecutivo de Boris Johnson, para que revise políticas como el recorte del presupuesto dedicado a prisiones, la privatización del sistema de vigilancia de libertad condicional y la liberación temprana de recursos para ahorrar costes en las cárceles.