Cacería humana en Alemania: buscan a un fugitivo vestido de militar y armado con pistola, cuchillo y un arco con flechas

Una auténtica cacería humana. Eso es lo que cientos de policías alemanes llevan intentado ayer y hoy en una operación que trata de detener a un hombre de 31 años con ropa de camuflaje que desarmó a cuatro oficiales a punta de pistola un día antes y luego huyó al bosque con una pistola, un cuchillo y un arco y una flecha, al más puro estilo “Rambo”.

Las autoridades advirtieron a los residentes de la ciudad de Oppenau, en el suroeste de Alemania, que se quedaran dentro de sus casas mientras los oficiales, apoyados por equipos tácticos, perros rastreadores y helicópteros, peinaban el terreno irregular circundante.

En un paso inusual, las autoridades identificaron públicamente al sospechoso por su nombre como Yves Etienne Rausch, y dijeron que era conocido por la policía por delitos previos con armas de fuego, que probablemente llevaba varias armas y podría ser violento.

La agencia de control de tráfico aéreo de Alemania declaró una zona de exclusión aérea de tres millas náuticas (3.5 millas) en la región de la Selva Negra alrededor de Oppenau.

Un miembro del público alertó a la policía el domingo temprano sobre una persona sospechosa que portaba un arco y una flecha. Acto seguido, los oficiales llevaron a cabo una verificación de identidad de Rausch, quien se describió como de 170 centímetros (alrededor de 5 pies, 7 pulgadas) de alto, calvo, con barba de chivo y necesita gafas.

Las autoridades dijeron que el sospechoso inicialmente cooperó, pero de repente apuntó con un arma a los oficiales, amenazándolos y obligándolos a entregar sus armas de servicio. Nadie resultó herido en el incidente, a unos 30 kilómetros (19 millas) de la frontera de Alemania con Francia.

Se cree que Rausch ha estado viviendo en el bosque durante semanas, según la oficina regional de policía en Offenburg.

Las armas robadas a los agentes de policía son pistolas semiautomáticas P2000 con capacidad para 16 balas cada una, lo que supone que el fugitivo podría tener 64 disparos adicionales a su disposición.

Según Infobae, Rausch ha tenido trabajos ocasionales como trabajador ferroviario y cuidador de un campo de golf, dijo antiguo vecino, que lo describió como una persona complicada. De hecho, vivió un tiempo en su coche junto a la piscina local antes de mudarse a la cabaña al borde del bosque.

Según Bild, pasó un tiempo en prisión por disparar a su novia con un arco y una flecha.

Se citó a un portavoz de la policía que dijo que el hombre estaba en un estado de “emergencia psiquiátrica” y no debía ser abordado.