Brasil

Detenido por corrupción el alcalde de Río de Janeiro

Marcelo Crivella, que estaba a ocho días de concluir su mandato, está acusado de liderar una organización criminal para “obtener ganancias ilícitas de las más variadas formas”

El alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, camina al interior de la comisaría de Policía
El alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, camina al interior de la comisaría de PolicíaFABIO MOTTAAgencia EFE

El Sistema parece infranqueable. Solo a veces puede romperse desde adentro entrando por finas grietas. Son victorias pírricas porque pronto vuelve a reconstruirse y la corrupción a imponerse como modo de gobierno. Se encuentra enquistada en la médula de ese gigante que no despierta llamado Brasil.

El alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, un ex pastor evangélico aliado del presidente Jair Bolsonaro, fue detenido y destituido de su cargo este martes por su presunta implicación en una trama de sobornos, en un nuevo episodio de corrupción en la ciudad “tarjeta postal” de Brasil.

A nueve días de terminar su mandato, Crivella fue detenido por la mañana en su casa del acomodado barrio de Barra de Tijuca, según mostraron imágenes de la televisión GloboNews.

La jueza Rosa Helena Penna Macedo Guita, del Tribunal de Justicia de Río de Janeiro, determinó igualmente la destitución de Crivella, a quien apunta como “jefe de una organización criminal (…) instalada en el ámbito de la Alcaldía de Río con la finalidad de obtener ganancias ilícitas de las más variadas formas”.

Antes de ingresar en la sede de la Policía Civil, el edil, de 63 años de edad, se dijo blanco de una “persecución política”. “Fui el alcalde que más actuó contra la corrupción en Río de Janeiro. Pido justicia”, agregó Crivella, derrotado en las elecciones de noviembre tras una agresiva campaña en la cual recibió el apoyo de Bolsonaro.

En el mismo operativo fueron detenidas otras cinco personas, entre ellas el empresario Rafael Alves, presunto organizador de la trama y hermano de Marcelo Alves, ex presidente de la agencia municipal de turismo Riotur.

También fue detenido Mauro Macedo, ex tesorero de las campañas de Crivella y primo de Edir Macedo, fundador de la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD, neopentecostal), de quien Crivella es sobrino. Emir Macedo ha sido varias veces procesado en Brasil y EE UU acusado de blanqueo de dinero y abusos sexuales.

Según la investigación, que empezó en 2018 con la delación de un cambista, empresas que querían cerrar contratos con Riotur daban cheques al empresario Rafael Alves.

La magistrada Macedo Guita pidió prisión preventiva para todos los acusados, que declararon en una audiencia ayer a la tarde.

Un polémico mandato

El alcalde de la “cidade maravilhosa” termina de este modo su mandato marcado por innumerables polémicas, dado que el 1 de enero cederá el cargo a Eduardo Paes (MDB, centro derecha), quien lo derrotó por casi 30 puntos de ventaja (64% a 36%).

En el último debate de la campaña, Crivella insistió en que Paes iría inevitablemente a la cárcel por supuestos hechos de corrupción.

Durante todo su mandato, Crivella fue objeto de varios procedimientos de destitución en el legislativo municipal, por malas prácticas y gestión deficiente.

El último fue motivado por un escándalo denunciado por TV Globo y apodado “Guardianes de Crivella”, un grupo de funcionarios públicos que intimidaban a los periodistas mientras hacían reportajes frente a los hospitales municipales desbordados por la pandemia de coronavirus.

El estado de Río, con su capital homónima de 6,7 millones de habitantes, es proporcionalmente el más afectado por la pandemia que ya dejó más de 187.000 muertos en Brasil.

Crivella también fue acusado de mezclar política y religión y de favorecer a los miembros de su iglesia. En julio de 2018, según el diario “O Globo”, prometió durante un encuentro con pastores evangélicos que los fieles de la IURD tendrían prioridad para ser operados de cataratas en clínicas municipales.

La Fiscalía abrió recientemente una investigación por presunto uso de la Iglesia Universal para lavar dinero procedente de la corrupción.

En su gestión, Crivella dio la espalda a grandes eventos turísticos marcados por los excesos de alcohol y la sensualidad, como el carnaval, un imán de divisas. De hecho mientras que San Paulo vuelve al estado de alarma, Rio se caracteriza por imágenes con las playas a rebosar. Crivella, al igual que Bolsonaro, siempre estuvo a favor de no cerrar nada por la pandemia.

Crivella será reemplazado por el presidente de la Cámara Municipal, Jorge Felipe (DEM, centro derecha) hasta que Paes asuma como regidor el 1 de enero.

Corrupción enquistada

Esta detención suma otro oscuro episodio al historial del Estado de Río de Janeiro, de 16,5 millones de habitantes, virtualmente quebrado y en permanente crisis de seguridad.

Actualmente el gobernador, Wilson Witzel, está destituido temporalmente por sospechas de corrupción en el área de la salud en plena pandemia de coronavirus.

Con Witzel, cinco de los seis gobernadores de Río en funciones desde 1998 han tenido problemas con la Justicia, y cuatro de ellos estuvieron presos en algún momento.

El caso más emblemático es el de Sergio Cabral (2007-2014), preso desde 2016 y condenado a cerca de 300 años de cárcel en diferentes casos de corrupción, incluido uno relacionado con las obras de remodelación del estadio Maracaná para el Mundial de 2014.