Francia rinde homenaje a Samnuel Paty, el profesor decapitado por un yihadista

Los colegios franceses rindieron hoy un homenaje al profesor que fue decapitado por un islamista radical el año pasado después de que el maestro mostrara caricaturas del profeta del Islam durante una clase. Samuel Paty, profesor de historia y geografía, fue asesinado el 16 de octubre del año pasado cerca de su escuela en un barrio del noroeste de París por un joven de 18 años de origen checheno que se había radicalizado. El atacante, a su vez, fue asesinado a tiros por la policía.

El homenaje nacional de dos días incluye un minuto de silencio que se realizará en las escuelas este viernes, con los profesores para organizar un debate en las clases con los alumnos en torno a la memoria de Paty. El sábado se llevará a cabo una ceremonia en el Ministerio de Educación, donde se develará una placa en honor a Paty. Su familia también se reunirá con el presidente Emmanuel Macron y el primer ministro Jean Castex, y se organizará una reunión cerca de la escuela del maestro.

El nombre de Paty fue divulgado en las redes sociales después de un debate en clase sobre la libertad de expresión durante el cual éste enseñó caricaturas publicadas por el periódico satírico Charlie Hebdo, donde varios yihadistas perpetraron una matanza en 2015. Paty propuso a los alumnos musulmanes que salieran del aula, consciente de que este hecho podría ofender sus creencias. El profesor asesinado había sido objeto de amenazas durante varios días tras enseñar las caricaturas del profeta durante un seminario sobre la libertad de expresión y el impacto en los medios de comunicación.

Las autoridades identificaron al asesino de Paty como Abdoullakh Anzorov, un refugiado checheno nacido en Moscú. Anzorov se atribuyó la responsabilidad en un texto acompañado de una fotografía de la víctima encontrada en su teléfono.

Desde entonces, 16 personas han sido acusadas en el caso, la mayoría de ellas por “complicidad en un asesinato terrorista” o “asociación delictiva”. Entre ellos se encuentran cinco alumnos de la escuela de Paty, todos menores, acusados de haber ayudado al asesino a cambio de promesas de pagos de 300-350 euros (348-406 dólares). La investigación estableció que el agresor conocía el nombre del maestro y la dirección de su escuela, pero no tenía los medios para identificarlo.

Los sospechosos también incluyen al padre de un estudiante que publicó videos en las redes sociales que llamaban a la movilización contra el maestro. Su hija ha sido acusada de difamación. Un activista islamista que ayudó al hombre a difundir los virulentos mensajes que nombraban a Paty también fue acusado en el caso.