Donald Trump

Las audiencias sobre el asalto al Capitolio reflejan un EE UU dividido

Los demócratas quieren dañar la imagen de Trump ante su posible regreso en 2024

Ivanka Trump comparece en la comisión del asalto al Congreso de EEUU
Ivanka Trump comparece en la comisión del asalto al Congreso de EEUUMICHAEL REYNOLDSAgencia EFE

La serie de audiencias esta semana sobre el asalto al Capitolio en 2021 ha tejido una compleja narrativa sobre los esfuerzos de aliados republicanos de Donald Trump de revertir la victoria presidencial de Joe Biden. Pero las audiencias no producirán cargos criminales, profundizan las divisiones políticas y podrían sumar riesgos para los demócratas en los comicios legislativos de noviembre próximo.

Por televisión, ordenador o teléfono móvil, millones de estadounidenses han podido sintonizar las históricas audiencias del Comité Selecto de la Cámara de Representantes, conformado por siete demócratas y dos republicanos. Desde el año pasado, el comité, liderado por el demócrata Bennie Thompson y la republicana Liz Cheney, ha entrevistado a más de mil personas como parte de su investigación sobre el ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021 a manos de partidarios de Trump.

Su objetivo es demostrar que Trump promovió la conspiración que dio pie a la violencia en el Capitolio a manos de una turba para bloquear la certificación del triunfo de Biden en noviembre de 2020. Al menos cinco personas perdieron la vida en conexión con el ataque, incluyendo un agente, según un informe del Senado.

Las audiencias reflejan las profundas divisiones de la clase política: para los demócratas, no hay duda de que Trump propagó información falsa sobre un presunto fraude electoral e incitó a sus seguidores a la violencia, mientras que, para los republicanos, las audiencias son tendenciosas y son parte de un esfuerzo por impedir el posible regreso de Trump a la Casa Blanca tras los comicios de 2024.

“Es importante que el Congreso realice estas audiencias para concientizar a la población sobre la gravedad de lo que pasó en el Capitolio, porque se intentó dañar la democracia de EEUU, y la gran tarea es establecer los hechos. Parte del problema es que el expresidente (Donald) Trump es parte de un culto y sus seguidores le creen, sin importar lo que diga”, dijo a LA RAZÓN Eric Langer, profesor de Historia y analista político de la Universidad Georgetown.

“Estamos viendo la severidad del ataque contra la democracia, y eso podría impactar la dinámica de las elecciones… hay más republicanos que no quieren seguir difundiendo la mentira sobre el fraude electoral; se está librando una lucha por el alma del Partido Republicano”, afirmó.

Para Langer, es difícil predecir lo que ocurrirá en las elecciones porque el país está dividido y existen varios “ecosistemas de noticias” en los que, por ejemplo, medios de tendencia conservadora “solo muestran algunas partes de las audiencias”.

Trump contra Pence

La tercera audiencia, el jueves pasado, dejó al descubierto la animadversión de Trump por el vicepresidente, Mike Pence, quien desoyó sus órdenes de bloquear los resultados del Colegio Electoral que dieron la presidencia a Biden.

Durante la audiencia, el comité difundió testimonios de quienes presenciaron una acalorada llamada telefónica en el Despacho Oval en la que Trump criticó a Pence por negarse a impedir la certificación electoral durante una sesión conjunta del Congreso, y dejó en claro que se equivocó al seleccionarlo vicepresidente.

El comité recogió testimonios de Eric Herschmann, abogado de la Casa Blanca,Ivanka Trump, hija del mandatario republicano, y Nicolas Luna, uno de los asistentes de éste. “Recuerdo haber escuchado la palabra ‘flojo’. (Trump) lo llamó flojo, no recuerdo cómo se lo dijo, si “eres un flojo” o “serás un flojo”, pero recuerdo que dijo ‘flojo’”, explicó Luna.

Millones de estadounidenses han seguido las audiencias, la primera de las cuales, el pasado 9 de junio, se llevó a cabo en horas de máxima audiencia y, según la empresa Nielsen, atrajo a al menos 20 millones de personas.

Como las audiencias no se llevan a cabo en un tribunal, éstas no pueden arrojar cargos criminales contra quienes se implicaron en la planeación o ejecución del ataque. El Comité Selecto sí intenta persuadir al Departamento de Justicia a que inicie un proceso para castigar a los responsables. Sin embargo, no está claro si en una eventual “hoja de ruta” judicial, Trump afrontaría cargos por su papel en el caos.

Elecciones clave para el Congreso

Los sondeos muestran que, de cara a los comicios de noviembre próximo -en los que los demócratas se juegan el control del Congreso-, la inflación, el alza en los precios de la gasolina, y otros asuntos domésticos figuran entre los temas más acuciantes del electorado. Según la organización “FiveThirtyEight”, Biden cuenta con una tasa de aprobación del 39,9% y, por ahora, los republicanos tienen una leve ventaja sobre los demócratas -45% contra el 42,4%- en los comicios legislativos.

Así las cosas, todo indica que las audiencias podrían conllevar un riesgo político para los demócratas, especialmente para aquellos en distritos bajo control republicano.

Pero, 17 meses después del ataque al Capitolio, los demócratas esperan recordar a la opinión pública la gravedad del asalto liderado por ultraderechistas y lo que perciben como los esfuerzos republicanos por minar la democracia. Después de todo, aseguran, Trump y sus partidarios intentaron revertir la victoria de Biden en los tribunales, en las legislaturas estatales y, por último, en la protesta callejera que produjo la violenta toma del Capitolio.

Al iniciar las audiencias el pasado 9 de junio, Thompson advirtió: “Nuestra democracia permanece en peligro. El 6 de enero y las mentiras que condujeron a la insurrección han puesto en riesgo dos siglos y medio de democracia constitucional. El mundo mira lo que estamos haciendo acá”.