El Estado Islámico llama a los talibanes “yihadistas rosas” por criticar el atentado contra los rusos

El atentado contra la embajada rusa en Kabul, en el que fueron asesinadas una veintena de personas, entre ellos nacionales de ese país, es presentado por el Estado Islámico como un aldabonazo contra los que denomina “yihadistas rosas” en referencia a los que pretenden contemporizar con occidente, en clara referencia a los talibanes. Aprovecha para amenazar a las otras legaciones diplomáticas.

En editorial publicado en el último semanario de la banda terrorista, señala que “el ataque cualitativo lanzado por los leones del Islam contra la embajada rusa en Khorasan (Afganistán) se convirtió (por parte de los medios talibanes) en una conspiración contra el Islam y los musulmanes! ¡Y una “yihad sospechosa” hecha y adaptada por la inteligencia global”.

Se sorprenden de que “estas embajadas ya no son “nidos para espiar” a los musulmanes, como solían llamarlos los “yihadistas” en el pasado, y aquí cabe señalar que la diferencia entre “yihadistas” y “mujaidines” .Los medios de comunicación que apoyan a los talibanes y sus hermanos, después del ataque, hablaron descaradamente sobre el papel histórico de la Embajada de Rusia en Afganistán! Es como si las embajadas cruzadas en los países musulmanes existieran para servir a los musulmanes y defender sus derechos. Apuntar a los nidos de espías y centros de coordinación de la guerra contra el Islam se ha convertido en una conspiración de los “yihadistas rosas””, subrayan.

“No esperábamos que después de todos estos años tuviéramos que volver a recordar el peligro de las embajadas y consulados cruzados y su papel chamuscado en la guerra contra los musulmanes; y no esperábamos que tuviéramos que hablar de la legalidad de atacar a estas embajadas”,

“¿Qué desgracia ha caído sobre las mentes y los corazones de los musulmanes de modo que apuntar a las embajadas de los cruzados se convierte en un tema de consideración?! ¡¿Qué crimen cometieron estas personas descarriadas para devolver a las generaciones de musulmanes a siglos de deambular y desconfianza, para que sospecharan de una operación dirigida a la embajada de un estado que mató a más musulmanes que los judíos?!

Subrayan que “todavía recordamos al comienzo de la guerra “ruso-ucraniana”, cómo algunos líderes de los movimientos apóstatas se apresuraron a transmitir fatwas a los musulmanes que vivían en Ucrania, permitiéndoles luchar en las filas del ejército cruzado ucraniano contra el ejército cruzado ruso! Con el pretexto de la venganza contra Rusia, que cometió los crímenes más atroces contra los musulmanes en Siria, pero si los musulmanes logran atacar la embajada de la Rusia Cruzada y matar a sus empleados, entonces esto se convierte en una yihad ilegal y un acto sospechoso que atrae la sedición. contra los musulmanes?!

“La Rusia cruzada mantuvo su embajada en Afganistán durante los años de la guerra, ¡incluso después de la “retirada soviética”! ¡Incluso después de la “retirada estadounidense”! Es decir, Rusia estaba muy interesada en mantener su embajada activa, trabajando y coordinando con cualquier parte que gobierne Afganistán, porque ve en este país una dimensión estratégica necesaria para su seguridad. La supervivencia de su embajada. está indudablemente enfocada a este objetivo, alcanzar este objetivo de seguridad soberana fue una sorpresa para todas las partes a nivel local y regional, especialmente a la luz de su repetido y exhaustivo discurso sobre la eliminación del Estado Islámico y la limitación de sus capacidades”.

“A todos se le notaba después del atentado, la ansiedad dominaba las declaraciones de los líderes talibanes, temiendo que se dañara su relación con Rusia; y temiendo que el resto de embajadas cruzadas se vieran obligadas a abandonar Afganistán”.

Finalmente, recuerdan que “fue por la gracia de Dios Todopoderoso que el Estado Islámico logró hace un año atacar a las fuerzas estadounidenses y sus espías en el aeropuerto (Kabul), causando en sus filas las mayores pérdidas humanas en muchos años. . Para confirmar, con el ataque a la embajada rusa, que la seguridad es un sueño que los cruzados y sus guardias no lograrán en el suelo de Khorasan”.