El 63% de los americanos cree que Biden no llegará a 2028

«Juntos, ¡podemos terminar el trabajo!», decora sobre una imagen del presidente y la vicepresidenta de Estados Unidos todas las cabeceras del eslogan Biden-Harris publicado en las redes sociales. Una imagen que les permite empezar a recaudar fondos y que, a menudo, vale más que mil palabras. O eso debió pensar el equipo responsable de arrancar la campaña de reelección de los demócratas para 2024 al publicar, el día que se hizo el anuncio oficial, una fotografía del presidente de Estados Unidos y su vicepresidenta. Muy sonrientes, caminando por el exterior del ala oeste de la Casa Blanca, conversando casi a carcajadas y con un cariñoso lenguaje corporal entre ellos.

«Como estadounidenses, creemos en la libertad y creemos que nuestra democracia solo será tan fuerte como nuestra voluntad de luchar por ella», puede leerse del puño de Harris.

A pesar de haber asegurado, durante su primera candidatura a la presidencia de Estados Unidos en 2020, que no optaría a la reelección, Joe Biden anunciaba el martes que sí aspira a prolongar su residencia en la Casa Blanca para un segundo mandato. Hace dos años, Biden aseguró que sería su mano derecha,Kamala Harris, quien optaría –en su lugar– a la reelección. Pero ni su gestión ha cuajado ni su carisma convence a los estadounidenses.

Tal vez por esa razón el día a día de la agenda del presidente Biden incluye a Harris con más frecuencia desde hace semanas, invitándola casi a diario al 1600 de la Avenida Pensilvania para participar en diversos eventos y reuniones, y donde también comparten la hora del almuerzo en múltiples ocasiones. Y si bien no ha sorprendido que Biden siga contando con ella, sí ha causado cierto malestar en Washington la estrategia del presidente en cuanto al peso político que le da a su vicepresidenta.

El 63% de los votantes cree que el presidente Biden, de ser reelegido, no podrá culminar su segundo mandato. Ante ese posible escenario, y, según recientes encuestas, los votantes interpretan la postulación de Biden a la reelección como la entrega directa del poder a Kamala Harris. A falta de 19 meses para que terminen sus primeros cuatro años de mandato, al presidente demócrata –que ahora tiene 80 años– le quedarían casi seis años de gestión.

Es decir, si su salud se lo permite, Biden culminaría su presidencia en 2028, con 86 años de edad. De ahí la preocupación principal de los votantes, tal y como avalan las mediciones. Recientes sondeos muestran, además, que la imagen presidencial no acaba de repuntar del todo. Tampoco el anuncio oficial causó el esperado furor. Una encuesta de CNN realizada por SSRS asegura que apenas un tercio de la población estadounidense cree que Biden merece la reelección, mientras que una gran mayoría de los votantes demócratas afirma que le gustaría tener otro candidato.

Lo cierto es que tampoco le sobran opciones al Partido Demócrata, a quien los pasos del expresidente Donald Trump siguen también muy de cerca y, por ahora, nada ni nadie les impide volver a repetir fórmula de enfrentamiento partidista. Todo apunta a que Biden y Trump volverán a verse las caras en 2024. En cuanto a una posible contienda electoral entre el actual y el anterior inquilino de la Casa Blanca para las presidenciales de 2024, los encuestados adelantan al republicano en los sondeos por cerca de cinco puntos, según da a conocer Harvard CAPS/Harris.

Aunque, hasta entonces, cualquier cosa es posible. Y es que un simple día en Washington, en términos políticos, es toda una eternidad.