Elecciones en Alemania

Una mujer dirigirá el SPD por primera vez

Una militancia dividida elige a Andrea Nahles para salvar al partido tras la debacle electoral

Andrea Nahles es felicitada tras su elección como presidenta del SPD
Andrea Nahles es felicitada tras su elección como presidenta del SPDlarazon

Una militancia dividida elige a Andrea Nahles para salvar al partido tras la debacle electoral.

En Wiesbaden se decidió este domingo el futuro inmediato del Partido Socialdemócrata alemán. La candidata favorita a presidir el partido, la ex ministra de Trabajo y Asuntos Sociales de la última coalición de Angela Merkel, fue elegida con uno de los peores resultados de la historia del partido. Sólo el 66% de los delegados votaron a Andrea Nahles, de 47 años, católica declarada, divorciada y madre de una hija, con estudios de Filología y Ciencias Políticas. Nahles toma las riendas del partido después de 30 años de militancia y de haber sido primero jefa de las juventudes del SPD, los Jusos, y más tarde diputada y secretaria general.

Será la primera mujer al frente del SPD en su más de siglo y medio de historia. «Muchas mujeres conocen esos raros techos de cristal con los que una se topa una y otra vez, y hoy, aquí, en este congreso del partido, este techo de cristal será traspasado en y por el SPD», exclamaba entusiasmada Nahles en su discurso antes de que tuviera lugar la votación. La candidata alternativa era, en todo caso, otra mujer: Simone Lange, la alcaldesa de Flensburgo, que representaba una opción más a la izquierda de Nahles, y quien ha criticado en numerosas ocasiones la llamada «Agenda 2010» que el SPD introdujo en la primera década del siglo junto a los verdes y a la que los críticos atribuyen la mayor precarización de las relaciones laborales y el aumento de la pobreza.

A pesar de que Lange era una completa desconocida para muchos miembros del partido a nivel nacional hasta hace unas pocas semanas, ha obtenido casi un tercio de los votos. Una muestra, junto a la renuncia en febrero del hasta entonces presidente del partido, Martin Schulz –elegido con el 100% de los votos hace un año–, de que tanto la base como la cúpula del partido están divididas. El propio Schulz apostó públicamente en un primer momento por no repetir una gran coalición y el jefe de las juventudes socialdemócratas, Kevin Kühnert, protagonizó asimismo una dura campaña interna para que los militantes votasen en contra de la misma.

La Nahles victoriosa representa el ala conservadora del partido, que aunque sabe que la única opción que le quedaba para gobernar era hacerlo junto con la coalición electoral liderada por Merkel, es consciente del desencanto y enfado de una parte de sus electores por este mismo motivo. Por eso, Nahles se encuentra ahora con la difícil tarea de reanimar un Partido Socialdemócrata que en las últimas elecciones generales al Bundestag consiguió el peor resultado de su historia, un 20,5% de votos. De ahí que junto a la votación de la presidenta, los delegados aprobaran un documento en el que se recogen las que ahora deberían ser las líneas maestras para la renovación del partido, que por otro lado resultan muy generales y poco innovadoras, como discutir el rol de Alemania en Europa y el mundo, o crear la posibilidad de foros online para que los miembros del partido puedan participar más activamente. Lo que sabe la nueva líder del SPD es que deberá reorientar la nave porque en los últimos años no ha sabido adaptarse al rumbo de la política y la sociedad que le da la espalda.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, acudió al congreso en calidad de invitado internacional y realizó un discurso en la apertura del evento en el que cargó contra el independentismo, una «amenaza no sólo para España, sino también para Europa».