Tensión diplomática

Crece la tensión entre India y Pakistán con disparos en la frontera y violaciones del alto el fuego

Esta es la segunda violación del alto el fuego en la frontera que se produce en los dos últimos días, coincidiendo con la profunda crisis diplomática en la que se encuentran sumidos ambos países

La India denunció este sábado una nueva violación del alto el fuego, cometida por Pakistán a lo largo de la Línea de Control, la frontera de facto que separa a ambos países en la disputada región de Cachemira, e indicó que respondió con más disparos, sin notificar que se produjeran víctimas.

"En la noche del 25 al 26 de abril de 2025, varios puestos del Ejército de Pakistán realizaron disparos de artillería ligera no provocados a lo largo de la Línea de Control en Cachemira. Las tropas indias respondieron adecuadamente con armas pequeñas. No se reportaron bajas", dijo el Ejército indio en un comunicado recogido por medios indios.

Esta es la segunda violación del alto el fuego en la frontera que se produce en los dos últimos días, coincidiendo con la profunda crisis diplomática en la que se encuentran sumidos la India y Pakistán. En ambas ocasiones, no obstante, las Fuerzas Armadas indias dijeron que no hubo víctimas.

Las violaciones del alto al fuego a lo largo de la Línea de Control son relativamente frecuentes, y ambos países se acusan mutuamente de iniciar los ataques y de solo usar la violencia como respuesta defensiva.

La tensión histórica entre la India y Pakistán se disparó nuevamente el pasado martes tras un ataque terrorista en la Cachemira controlada por la India, en el que murieron 26 personas.

Nueva Delhi acusó a Islamabad de estar detrás del ataque en esta región, por la que ambos países se disputan la soberanía desde su independencia del Imperio británico en 1947.

Según la India, el país vecino patrocina la revuelta armada que atraviesa la Cachemira india desde 1989, y que ha provocado decenas de miles de víctimas.

En el marco de la escalada, el Gobierno indio ha ordenado varias medidas, como la expulsión de diplomáticos, la suspensión de los visados de paquistaníes en su territorio, la clausura de su frontera terrestre con Pakistán y la suspensión del Tratado de Aguas del Indo, entre otras medidas.

Esta es la primera vez, desde su firma en 1960, que este esencial acuerdo entre ambas partes, que había sobrevivido a guerras y conflictos menores, fue revocado por la India.

Pakistán ha respondido con medidas recíprocas con la expulsión de diplomáticos indios y la cancelación de algunos visados indios, además de cerrar su frontera, pero también ha prohibido a las aerolíneas indias usar su espacio aéreo y ha cancelado todos los acuerdos bilaterales.

6 supuestos insurgentes muertos en Pakistán

Por otra parte, al menos seis supuestos insurgentes murieron y cuatro resultaron heridos en una operación de inteligencia de las fuerzas de seguridad paquistaníes en la conflictiva provincia de Khyber Pakhtunkhwa, en el noroeste del país, informó el Ejército.

La operación se desarrolló anoche en el volátil distrito de Bannu, próximo a la frontera con Afganistán, y donde ayer resultaron heridos, en un ataque insurgente contra un centro de salud, dos oficiales de policía que protegían a trabajadores de la vacunación contra la polio.

“Durante la operación, nuestras propias tropas atacaron eficazmente la posición de khwarij y después de un intenso intercambio de disparos, seis khwarij murieron, mientras que cuatro resultaron heridos”, dijo en un comunicado la oficina de medios del Ejército.

Las autoridades paquistaníes emplean desde hace un año el término "khwarij" para referirse a militantes extremistas. El comunicado agregó que se estaba llevando a cabo una "operación de desinfección" para eliminar a cualquier militante restante.

El primer ministro Shehbaz Sharif elogió a las fuerzas de seguridad tras la operación, en un comunicado emitido por su oficina.

"Los nefastos designios de los terroristas, que son enemigos de la humanidad, seguirán siendo aplastados", dijo el primer ministro, según la nota.

Pakistán culpa al Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), o talibanes paquistaníes, de emplear suelo afgano para preparar sus ataques en Pakistán.

La actividad de este grupo armado en Pakistán aumentó tras la llegada al poder en Afganistán de sus hermanos ideológicos, lo que ha dado pie a acusaciones de Islamabad contra los talibanes afganos de dar cobijo en su territorio a formaciones insurgentes, sin tomar medidas para expulsarlos.

Los talibanes afganos, no obstante, niegan las acusaciones del país vecino.

El TTP es especialmente activo en Khyber Pakhtunkhwa, una de las dos provincias paquistaníes que hacen frontera con Afganistán.

La otra región fronteriza es Baluchistán, que también atraviesa un fuerte repunte de la violencia armada, en este caso atribuido a grupos separatistas que denuncian que el Gobierno paquistaní explota los ricos recursos minerales de la región y se queda con los beneficios.

El aumento de violencia ha dado lugar a operaciones casi diarias de las fuerzas de seguridad paquistaníes en ambas regiones.