Terrorismo
El Estado Islámico redobla sus ataques contra cristianos en Mozambique
Nuevos asesinatos y decapitaciones en el marco de un genocidio al que no se le da la publicidad suficiente
Hay teóricos del periodismo que sostienen que la repetición de noticias puede producir “fatiga informativa” en el lector. Puede ser con algunos asuntos, pero cuando se trata de cadáveres, de seres humanos asesinados sistemáticamente por el hecho de profesar una religión distinta de la de sus ejecutores, ocultar la noticia no contribuye al “descanso” de quienes la pueden leer, sino a privarle de una información relevante para conocer qué es lo que está pasando y poder formar su criterio al respecto.
Frente a situaciones trágicas que se producen todos los días en una parte del mundo, publicitadas como debe ser, ignorar lo que ocurre en África, con el genocidio que los yihadistas del Estado Islámico (Daesh, Isis) realizan sobre los cristianos podría ofrecer a quienes no quieren afrontar este terrible problema la “tranquilidad” de la opacidad informativa. Los hechos se seguirían produciendo y su ocultamiento no iba a contribuir a que los que los llevan a cabo cesaran en su campaña criminal.
Es verdad que el terrorista, al perpetrar sus delitos, buscan la publicidad porque la difusión del miedo es uno de sus objetivos. Si los atentados se publicitaran sin más, con las cifras de muertos y heridos, tal vez podría ser así, pero si se contextualizan adecuadamente sirven para que la opinión pública tenga conocimiento de algo que, en caso contrario, ignoraría.
En las últimás horas, Daesh ha publicado, en su siniestra “letanía” de contar los crímenes que comete, lo siguiente:
Región de Mozambique
Con el éxito de Allah, los soldados del Califato capturaron a un cristiano en el pueblo de Nahovi en la región de Chiure y lo decapitaron, y toda la alabanza es para Allah.
Región de Mozambique
Nueve cristianos muertos y heridos en un nuevo ataque de los muyahidines en Mocimboa da Praia, en el norte de Mozambique. Gracias a Dios, los soldados del Califato atacaron el barrio de Filipe Nyusi, en la ciudad de Mocimboa da Praia, Cabo Delgado. Los muyahidines mataron al menos a cuatro cristianos e hirieron a otros cinco. Alabado sea Dios.
Es verdad que esta noticia se parece a la anterior, y a la anterior, pero las víctimas, de la misma religión, con nombres y apellidos que no se citan, son diferentes. Se merecen, al menos, el recuerdo y la denuncia que supone una noticia sobre lo que les ha ocurrido.