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Grecia recupera la radiotelevisión pública tras dos años de cierre

La Razón
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Grecia ha recuperado la radiotelevisión pública ERT que volverá a abrir las puertas y a readmitir a sus empleados tras dos años de cierre.

Grecia ha recuperado la radiotelevisión pública ERT que volverá a abrir las puertas y a readmitir a sus empleados tras dos años de cierre, en una decisión unilateral del Gobierno del conservador Andonis Samarás, que provocó un gran revuelo mediático y popular dentro y fuera del país.

La ley contó únicamente con el respaldo del izquierdista Syriza, y su socio de Gobierno, el nacionalista Griegos Independientes.

“El regreso de la radiotelevisión pública ERT es una contundente respuesta de dignidad, una victoria de la democracia”, dijo durante el debate el ministro de Estado, Nikos Pappás, quien ha encabezado el proyecto.

Está previsto que ERT reabra conforme a su antigua estructura de cuatro canales, uno de ellos internacional, y 19 emisoras de radio regionales y cuente con los empleados despedidos que tenían contratos indefinidos.

La ley pretende garantizar la independencia y la pluralidad informativa y proteger a la nueva ERT de las antiguas prácticas de despilfarro de dinero público, control gubernamental y contrataciones amañadas.

“Necesitamos una emisora pública abierta y libre de los patologías del pasado. Un contrapeso a la propaganda, independiente de cualquier intervención del Estado, pero sobre todo, independiente de los intereses privados, como el proyecto de ley especifica”, destacó Pappás en el hemiciclo.

La norma recoge la reducción del gasto en las producciones propias y en las externalizadas, y una auditoría sobre el estado de las cuentas.

Respecto a la contratación de personal, de los 2.595 trabajadores despedidos, se readmitirá a unos 1.500 que tenían contratos indefinidos, y en caso de que sea necesario más personal se celebrarán concursos públicos.

Cinco de los siete miembros del Consejo de Administración de ERT serán elegidos por la Comisión de Transparencia del Parlamento y los dos restantes por el personal del medio a través de voto secreto.

El Gobierno ha prometido que desaparecerán los contratos privilegiados con que contaban algunos directivos, para eliminar así las diferencias salariales.

Su reapertura era una de las grandes promesas de Syriza, que criticó duramente el cierre en junio de 2013.

Para Fuli Zavitsanu, una de las periodistas despedidas, hoy es un gran día.

“Estoy contenta porque parece que vamos a tener voz, no va a ser como antes cuando había gente en puestos de dirección colocada por los partidos para controlar y ganar dinero”, asegura a Efe Zavitsanu.

La periodista explica que se siente satisfecha, porque Syriza “ha hecho lo que dijo”, pero asegura no poder desligar esta buena noticia de la difícil situación que atraviesa el país en las negociaciones con los acreedores.

Ella ha estado durante estos dos años participando con un programa de radio en la plataforma “ERT Open”, creada por los trabajadores que han seguido emitiendo de forma autogestionada.

La transición desde la actual cadena pública Nerit, que Samarás abrió en abril de 2014, a ERT será progresiva, es decir, el canal no pasará a negro, sino que paulatinamente introducirá los nuevos contenidos.

El cierre de ERT provocó una oleada de oposición popular, desde la ocupación de sus instalaciones por parte de los empleados en los cinco meses siguientes, hasta las protestas en el extranjero que pedían su reapertura.

El Ejecutivo ha recalcado que la puesta en marcha de la televisión y la radio pública no supondrán un gasto adicional para el Estado, lo que hubiese podido crear recelo en los acreedores, porque ambos medios se financian a través de un canon que pagan los ciudadanos.

Entre las medidas que el Gobierno tiene previsto presentar a sus socios con el fin de aumentar la recaudación de impuestos figuran la licitación de frecuencias de televisión, pues las cadenas privadas griegas no han pagado hasta ahora por la explotación de sus licencias, y la regulación de los impuestos en la publicidad televisiva. Efe