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Isabel II pide encontrar "terreno común"ante la votación clave del Brexit

La reina de Gran Bretaña ha instado a "respetar los diferentes puntos de vista"en un discurso que se ha interpretado como un claro mensaje a los parlamentarios

La reina Isabel II, en una imagen de archivo / Reuters
La reina Isabel II, en una imagen de archivo / Reuterslarazon

La reina de Gran Bretaña ha instado a "respetar los diferentes puntos de vista"en un discurso que se ha interpretado como un claro mensaje a los parlamentarios.

En medio de la peor crisis institucional que atraviesa el Reino Unido a consecuencia del Brexit se había hablado mucho estos días de la posibilidad de que Isabel II, como jefa de estado, tomara cartas en el asunto para desbloquear el caos. Y la soberana, de 92 años, lo ha hecho. Eso sí, a su manera y sin romper la neutralidad que se le exige a un cargo que representa con maestría desde hace casi siete décadas.

Isabel II ha instado a hallar “terreno común"y a "respetar los diferentes puntos de vista"en un discurso que se ha interpretado como un claro mensaje a los parlamentarios, ante la votación clave que tendrá lugar en la Cámara de los Comunes el próximo martes. Tras cosechar la peor derrota de la historia al plantear el Acuerdo de Retirada cerrado con Bruselas, la premier Theresa May presentará a sus señorías su Plan B. Aunque la alternativa no se mueve de sus líneas rojas por lo que todo apunta a que el pacto será de nuevo rechazado. En definitiva, a tan sólo dos meses de que se cumpla la fecha de la salida, nadie sabe exactamente qué va a pasar con el Brexit.

En este contexto, la soberana ofreció el jueves un discurso para celebrar el centenario del Instituto de la Mujer, de Sandringham (este de Inglaterra), del que es presidenta. "Al buscar nuevas respuestas en la era moderna, yo personalmente prefiero las recetas probadas y comprobadas, como hablar bien de los demás y respetar los diferentes puntos de vista, unirse para hallar el terreno común y nunca perder de vista el objetivo general", afirmó. "Para mí, estos enfoques son intemporales y se los recomiendo a todos el mundo", sostuvo.

En un principio, la intervención pasó desapercibida. Sin embargo, el mensaje protagonizó ayer las portadas de los rotativos. Aunque sin aludir explícitamente el Brexit, los comentaristas interpretaron las palabras como un toque de atención a los diputados que, más de dos años después del histórico referéndum, no logran acordar una estrategia de salida. Para el próximo martes, los diputados de todos los partidos han presentado numerosas enmiendas. Pero ningún plan cuenta, a día de hoy, con el respaldo de la mayoría y May se niega a solicitar una extensión del artículo 50 por lo que el país se encamina a un divorcio caótico.

Como jefa de Estado en una monarquía parlamentaria, la Reina debe mantenerse políticamente neutra y no expresar opiniones personales, pero no es inusual que envíe mensajes indirectos cuando el país afronta retos trascendentales. En su pasado discurso de Navidad, Isabel II también aludió veladamente a las divisiones por la salida de la UE al incitar a "tratar a los demás con respeto"como "un buen primer paso hacia un mayor entendimiento".

Durante el referéndum de independencia de Escocia de 2014, también fue necesaria su intervención. Sin decir nada, lo dijo todo. Aunque jamás contará con confirmación oficial, es voz populi que desde Palacio se orquestó un escenario milimétricamente detallado cuando el Ejecutivo pidió auxilio días antes de la consulta al temerse que la independencia podía ser una opción real a raíz de las encuestas.

Fue entonces cuando, rompiendo con el protocolo, la soberana se acercó a hablar con la gente que se encontraba a la salida de la iglesia cercana al Castillo de Balmoral, su residencia de verano. En un hecho muy poco frecuente, la Policía invitó a la Prensa a observar de cerca la escena que tuvo lugar tras el servicio religioso que, curiosamente, había incluido una oración para “pedir a Dios que nos salve de opciones erróneas”. “Espero que la gente piense con mucho cuidado sobre su futuro", se limitó a decir la monarca que valoró los votos como “muy importantes”. No hizo falta nada más.

Por su parte, en marzo de 2016, tres meses antes del histórico referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la UE, el palacio de Buckingham tomó la insólita iniciativa de presentar una queja formal ante el organismo que supervisa los medios de comunicación contra la información que ocupaba la primera página del diario The Sun. “La reina apoya el Brexit”, rezaba el titular. El periódico basaba su información en una fuente no identificada que recordaba una conversación que supuestamente mantuvieron en 2011 Isabel II y Nick Clegg, entonces vice primer ministro del Gobierno y líder del Partido Liberal Demócrata.

Durante una comida en el castillo de Windsor, la reina habría expresado puntos de vista fuertemente euroescépticos y habría alertado de que la UE iba “en la dirección equivocada”. Nick Clegg se apresuró a desmentir la noticia. “No tengo ningún recuerdo de que eso ocurriera y no es el tipo de cosa que olvidaría”, señalo. Por su parte, un portavoz del palacio de Buckingham añadió que “la reina seguía siendo políticamente neutral como lo ha sido durante todo su reinado”.