París

Los parisinos se revuelven contra la remodelación de Notre Dame

La propuesta para frenar las obras en la explanada ha recogido cerca de 10.000 firmas en una semana

Artesanos que restauran Notre Dame
Artesanos que restauran Notre DameLas Piedras Cantan

El establecimiento de una zona verde en las inmediaciones de Notre Dame ha generado una ola de indignación entre los parisinos. Unas 10.000 personas han firmado esta semana una petición para frenar la construcción de un gran espacio abierto con césped y un 30% más de árboles en torno a la catedral, gravemente dañada en el incendio de 2019.

La iniciativa presentada por el Ayuntamiento de París lleva la firma del paisajista belga Bas Smets, ganador el año pasado de un concurso abierto a la participación internacional para rediseñar los 4.500 metros cuadrados disponibles. El proyecto está inspirado en las iglesias del otro lado del Canal de la Mancha, en un estilo británico con “grandes prados cerca de la iglesia, donde la gente puede sentarse a contemplarla y donde los niños pueden jugar”, explica Smets.

El belga hablaba de un nuevo “espacio público para el siglo XXI”, pero buena parte de la sociedad parisina rechaza los planes para sustituir los jardines cerrados por césped y árboles en un espacio abierto.

Sin embargo, la alcaldesa Anne Hidalgo, candidata del Partido Socialista en las últimas elecciones presidenciales en las que cosechó uno de los peores resultados históricos de la formación, mantiene sus planes de iniciar las obras en 2024 y dejarlas concluidas para 2027.

Los críticos sostienen que esta remodelación afectará a la plaza Jean XXIII y los jardines de Île-de-France, que datan de la década de 1840.

Ante las críticas, Ariel Weil, el alcalde del sector Centro de París que comprende los distritos 1, 2, 3 y 4, entre los que se encuentra Notre Dame, reconoció que la petición planteaba “una cuestión legítima” y que estaban abiertos a modificar el proyecto. Pero descartó incluir en estas modificaciones las reformas en la explanada de la catedral.

El proyecto de Smets contempla también la construcción un centro de visitantes de 34.000 metros cuadrados con vistas al Sena para acoger a grupos turísticos en la zona donde se encuentra en la actualidad un aparcamiento subterráneo. En este sentido, una parte de la oposición a Hidalgo, que cuestiona a la alcaldesa por su “obsesión ecologista”, aprueba sus planes.

Mientras, continúan las obras de restauración de Notre Dame tras el grave incendio que sufrió en 2019. A pesar de los planes del Ayuntamiento de remodelar el patio delantero, los jardines laterales y la parte posterior de la catedral a orillas del Sena, se mantiene inamovible la decisión de reconstruirla como una réplica fiel a la original.