La policía investiga el robo que sufrió un bañista en una playa de Córcega: el 'ladrón' fue una bestia de 500 kilos

La playa del Lotu, ubicada en el norte de la isla de Córcega y conocida por sus aguas cristalinas y su entorno virgen, fue escenario de un episodio tan surrealista como preocupante el pasado 22 de julio. Un toro, que deambulaba libremente por la zona, irrumpió entre los bañistas y se llevó el bolso de una turista, desatando una escena que parece sacada de una película de comedia.

La víctima, una mujer originaria de Nancy, Francia, se encontraba disfrutando de una jornada tranquila cuando el animal apareció sin previo aviso. En cuestión de segundos, el toro se apropió de su bolso, que contenía documentos personales, un teléfono móvil y las llaves de su alojamiento. El animal se alejó con el objeto colgado del cuello, como si fuera un accesorio más, dejando a los presentes entre la risa nerviosa y la incredulidad.

La turista ha presentado la denuncia correspondiente en la comisaría de Bastia, y aunque aún no ha recuperado sus pertenencias, asegura que el episodio será difícil de olvidar. “Nunca pensé que un toro sería el protagonista de mis vacaciones”, declaró entre risas. “Espero que al menos haya disfrutado del paseo con mi bolso”.

La policía local, lejos de tratar el incidente con tono dramático, compartió el suceso en sus redes sociales con un toque de humor, calificándolo como “el robo más insólito del verano”. Las autoridades han solicitado la colaboración ciudadana para recuperar los objetos perdidos, que podrían haber quedado esparcidos en los alrededores de la playa.

En respuesta, se han reforzado las señalizaciones en las playas y se ha iniciado una campaña informativa para orientar a los turistas sobre cómo actuar ante encuentros con animales en libertad. También se estudia la posibilidad de implementar cercados temporales en zonas de alta afluencia.,

La imagen del toro con el bolso colgado, capturada por un testigo y compartida en redes, se ha vuelto viral Mientras algunos usuarios comentan el episodio con humor, “ni los toros se resisten al estilo playero francés”, otros exigen medidas más contundentes para evitar que este tipo de situaciones se repitan.