Magdalenas sin azúcar en tres minutos y al micro: tu merienda caprichosa

Solo te hacen falta tres minutos y tres ingredientes para preparar las magdalenas sin azúcar que se van a convertir en tu perdición saludable. No llevan azúcar son súper nutritivas, dulces y esponjosas. Pero, lo mejor de todo, es que ni siquiera necesitas horno para prepararlas. ¡Tampoco moldes de silicona! Estas magdalenas se preparan en un vaso y al microondas. La que te vamos a mostrar es una versión de las magdalenas al microondas de la dietista- nutricionista Blanca García Orea. Ella las hace sencillas mientras que nosotras les hemos puesto arándanos y semillas. La base es la que ella suele utilizar pero de esta manera compruebas que dentro les puedes incluir tus ingredientes favoritos. ¿Lista?

Ingredientes:

• Un plátano maduro. Nosotras hemos empleado Plátano de Canarias porque, gracias a su reconocimiento comunitario europeo de Indicación Geográfica Protegida (IGP) sabemos que para su cultivo no se han usado herbicidas ni fungicidas en el campo y de que se han reducido al máximo los fitosanitarios. Puedes encontrarlo en los supermercados pero fíjate bien en su sello.
• Un huevo ecológico. Nosotras, como en el caso de la tortilla de avena, hemos utilizado los huevos ecológicos de Bonvoli en Madrid.
• Una cucharadita de cacao puro en polvo desgrasado. Hemos empleado el de Planeta Huerto porque además de ser ecológico y conservar todas las propiedades del cacao, tiene un sabor más intenso que otros y, por supuesto, no contiene azúcar.
• Un puñado de arándanos frescos.
• Semillas de lino molidas con chía, canela y manzana. Es una mezcla de Linwoods rica en proteínas y vitamina C que nos ayuda a reforzar el sistema inmunitario.

Todo lo que tienes que hacer es mezclar todos los ingredientes con ayuda de una batidora o directamente en un vaso con un tenedor si el plátano está bien blandito. Después, vierte la mezcla en un vaso pequeño. Llena solo la mitad del vaso. Mételo en el microondas tres minutos. Verás que poco a poco la mezcla va subiendo. Saca el vaso del horno, emplata y ¡disfruta!