Aquí no nos aburrimos

En España no tenemos un momento para el aburrimiento, vamos de sorpresa en sorpresa y de asombro en asombro. La velocidad de los hechos es tal que cuando estás empezando a adaptarte a un nuevo equipo de ministros y quieres ver el lado bueno de este Gobierno no elegido por los ciudadanos, uno de ellos dimite. Mi querido Máxim Huerta pasara a la historia como «Máxim, el Breve», ya que su mandato solo duró seis días.

Esta dimisión, por lo que he podido informarme, se debe a que hace unos años tuvo una Inspección de Hacienda. Algo, que supongo, ha tenido al menos media España y mucho más en los años de la tremenda crisis que fueron a saco. El Gobierno necesitaba recaudar sin tregua para paliar, a su vez, tantos desmanes y corruptelas. Nunca se me hubiese ocurrido que eso fuera motivo para no poder ser Ministro ni trabajar en algún organismo público. Se supone, que si pagó lo que le correspondía es un asunto concluido, ya que nunca estuvo imputado por defraudar a Hacienda. Pero lo que más me asombra de esta historia es la improvisación. Llaman a un amigo: «Oye Máxim, ¿quieres ser ministro?». «Sí, encantado». Hasta aquí todo normal. Lo que no lo es, es nombrar con ese cargo a una persona sin conocer su historia para después dejarle en una situación muy violenta dimitiendo, sin poder disfrutar las mieles del poder, coche oficial, guardaespaldas, etc. Un poco cruel, ¿no creen? Al nuevo Gobierno le va a costar encontrar personas válidas a las que Hacienda no haya cuestionado. Tendrá que buscar gente de rentas muy bajas, entre ellos algún pensionista. Es como Napoleón cuando buscaba 12 mujeres vírgenes para su coronación, le costó bastante decidiendo al fin no investigar demasiado entre las elegidas.

Entre todo este acontecer de noticias, hace unos días, nos levantamos con la de la condena de Urdangarín de 5 años y 10 meses con inminente entrada en la cárcel. He leído que el Ministerio de Interior está buscando alguna pequeña y acogedora donde enviarle. Increíble cómo puede cambiar la vida de unas personas que lo tenían todo para ser felices unido a un estatus privilegiado, por la codicia y falta de escrúpulos aprovechandose de su posición y cometiendo toda clase de ilegalidades. Lo siento mucho por sus hijos que están en edades muy difíciles y se han visto sometidos a un exilio (aunque sea dorado ) alejados de su familia y su país sin tener culpa de nada .

Mi lado de belleza esta semana ha sido el maravilloso Documental «Maria by Callas» del francés Tom Volf. Siempre tuve fascinación por esta mujer con la voz más maravillosa del siglo XX. El cineasta, enamorado de la Opera, ha hecho un trabajo impecable. Cinco años recuperando una extraordinaria documentación a través de entrevistas en las que, ella misma, cuenta su vida con imágenes desde que se trasladó con su familia de Nueva York a Grecia. Hay imágenes inéditas de su esfera más íntima. Maria Callas siempre sintió una especie de desolación interna. Pero su enorme éxito como gran Diva de la Ópera nos mostró otra cara de la verdadera María. El público la veneró como una diosa y triunfó en los grandes templos de la Ópera. Su vida fue una verdadera tragedia griega y este documental es una verdadera obra de arte que recomiendo ver, especialmente a los amantes de la Ópera.