Islas Baleares

Todas quieren A froilán

Don Juan Carlos ya dejó la isla y hoy todos los primos se han reencontrado tras la llegada de los hijos de Doña Cristina

Felipe Froilán, hijo de la infanta Elena, ayer tras acudir a un curso en la Escuela de Vela de Calanova
Felipe Froilán, hijo de la infanta Elena, ayer tras acudir a un curso en la Escuela de Vela de Calanovalarazon

Felipe Froilán no se despega de su móvil en Mallorca. Tanto para wasapear como para hacer fotos, hasta navegando tiene ocasión de teclear. Hoy él navegará con su barquito de la clase omega. Las cosas como son, emocionado, lo que se dice emocionado con la náutica no parece. Sí se le ve más interesado en corresponder a las chicas que se le acercan y le hacen mohínes. Dada la buena forma con la que ha regresado de Estados Unidos, con sus estilismos a la moda, con sus pantalones tobilleros doblados y la libertad que otorga la mayoría de edad, a Felipe Froilán no le faltan pretendientas. Ni rubias ni morenas, como pudo verse en las últimas imágenes.

En cuanto al resto de la familia, cada uno tiene sus quehaceres. La agenda oficial de la Familia Real en vacaciones es muy corta. Sin embargo, la que no conoce la Prensa es ligeramente más extensa. En ella apuntamos que el martes partía hacia rumbo desconocido el Rey Emérito, que hará alguna que otra aparición por Sotogrande y luego Dios dirá. Horas antes, a las 21:45 del lunes, después de cenar con sus hijas en Marivent, Doña Letizia sacaba su entrada para el Cine-Ciutat en el Centro Cultural de Escorxador –que proyecta películas independientes y en versión original– para ver «Sunset Song». Es la desgraciada historia de una chica que vive en un represivo entorno familiar en la Irlanda de principios del siglo XX y su lucha por sacar adelante tras la muerte de su padre las propiedades y vivir libremente su vida. No la acompañaba Don Felipe porque quizá ya había partido hacia Madrid. Desde el departamento de Comunicación de la Casa Real no quisieron decir oficialmente cuándo se ha ido y cuándo regresa.

- Compra de manjares

La agenda privada apunta que anoche, sobre las nueve, Don Felipe regresó a la isla, porque hoy se le espera por la mañana en el Real Club Náutico para regatear en el barco de la Armada, que aguarda en el atraque 13 a su patrón. Mientras que el Rey compite en su XXXV Copa, sus sobrinos Urdangarín, que también llegaban ayer a Mallorca, disfrutaron esta mañana en la escuela de vela donde navegan Felipe Froilán y Victoria Federica de las motos de agua. Por la tarde se apunta que podrían realizar el tradicional posado del matrimonio con las niñas, bien en Marivent o en cualquier marco incomparable de la isla.

El viernes también se espera que el Rey salga a regatear y por la tarde, sobre las cinco, se procederá a la entrega de diplomas en la escuela de vela, donde acuden los nietos de Don Juan Carlos y donde podría haber un encuentro de primos y quién sabe si una entrega de distinciones por parte de Doña Sofía o de Letizia. El año pasado las entregó la primera. Aunque la Reina Emérita no haya sido vista por la ciudad haciendo sus típicas compras de manjares como las afamadas sales Flor de sal d’es trenc o de productos naturales en the Body Shop, se sabe que sigue en Mallorca.

De hecho, Doña Sofía ha salido a navegar hasta Cabrera y seguro que, dada la expectación que hay con los catamaranes voladores, donde compite Pierre Casiraghi, no es de extrañar que saque la lancha Somni y se acerque con la familia por el campo de regatas a verlos volar, porque desde luego es todo un espectáculo. Por cierto, toda la Familia Real ha recibido el polo oficial de esta edición de la Copa de Vela por cortesía del real club náutico, y Doña Sofía ha sido invitada a tomar el «brunch» en la terraza del donde es precioso ver por las mañanas la salida de la flota.