Andalucía

«La política sanitaria de la Junta sigue siendo muy economicista, restrictiva y cicatera»

CC OO reclama al SAS un plan de acción para revertir las consecuencias del parón veraniego sin recurrir al sector privado

La consejera andaluza de Salud, Marina Álvarez, junto a la presidenta de la Junta, Susana Díaz (Foto: Ep)
La consejera andaluza de Salud, Marina Álvarez, junto a la presidenta de la Junta, Susana Díaz (Foto: Ep)larazon

CC OO reclama al SAS un plan de acción para revertir las consecuencias del parón veraniego como las «terribles listas de espera» sin recurrir al sector privado

«Manifestación suave o decorosa de ideas cuya recta y franca expresión sería dura o malsonante». Así define el diccionario de la Real Academia Española de la lengua qué es un eufemismo, término que no le resulta ajeno a la Federación de Sanidad de CC OO-A, desde la que transmiten a LA RAZÓN que cambiar palabras y apelar a la sinonimia para hablar de «camas en reserva» o de «agendas de especialidades diferidas» en lugar de decir que están «cerradas» puede servir para intentar «enmascarar la realidad», pero no cambia nada. Su responsable de Negociación Colectiva con el Servicio Andaluz de Salud (SAS), José Antonio Aparicio, asegura que en el ámbito sanitario «este verano está siendo similar a los de los últimos diez años, en el sentido de que no ha habido ninguna mejora» en materia de «contratación» o en la «programación de la actividad». A juicio de este sindicato, el Gobierno autonómico «sigue desarrollando» una «política sanitaria muy economicista, restrictiva y cicatera», la que antes atribuía a «la crisis» y ahora recuerda a «un modelo de gestión de la sanidad pública que no se diferencia en muchos aspectos del que la Junta critica en otras comunidades autónomas». Aparicio no duda en sostener que desde principios de julio hasta mediados de septiembre, «y en algunos centros hasta el 30 de éste», se prescinde de camas y «en casi todos los hospitales públicos se reduce a menos del 50% la actividad programada por la mañana en los quirófanos y al 0% por la tarde». «El derecho a la asistencia que tienen los usuarios y el de los empleados a trabajar en condiciones mínimamente honrosas e irrenunciables se ve sometido a una rebaja total y absoluta en estos meses», resume.

A CC OO-A le «preocupan» las consecuencias de ese parón en la actividad programada de quirófanos, consultas de especialidades y pruebas diagnósticas. Entre ellas el responsable de Negociación con el SAS sitúa «el estrés añadido que sufren los profesionales en detrimento de la calidad del servicio». Lo explica: «Estos meses algunos son apartados de sus servicios habituales, al quedar clausurados. Tienen que irse a otras plantas y atender a pacientes con patologías distintas a las que suelen tratar», con lo que «la especialización de los cuidados desaparece», avisa. «Sus prácticas, sus conocimientos, su desarrollo profesional diario no está vinculado al que se ven obligados a realizar en verano y en un espacio en el que no controlan», recalca. A esto se hilvana «el incremento en las listas de espera que son tremendas». Apunta que desde el Ejecutivo regional se suele argumentar en relación a ese punto que «los pacientes no se quieren intervenir en verano», a lo que fuentes del sindicato, con los datos que manejan, replican que no es del todo cierto, dado que son conscientes de que «hay muchos deseando ser intervenidos para subsanar su problema de salud».

Otra de las derivadas de la poda de actividad estival es «el colapso en las Urgencias los fines de semana, que se convierten en un embudo» y en escenario de situaciones «insostenibles para usuarios y sanitarios». «Están habilitadas para que los pacientes estén 24 horas, como mucho, y los hay que han permanecido días hasta desahogar plantas dando altas», relatan. Dibujado el escenario y con la vista puesta en el futuro, Aparicio anota que su organización sindical duda de que «las listas de espera quirúrgicas que se generan, o las de las consultas de especialidades o pruebas diagnósticas, se depuren dentro del sistema sanitario público a partir de septiembre, ya que en muchos casos son la fuente de alimentación de los servicios privados concertados». «Reconocemos que existe un déficit de profesionales en algunas especialidades –admite–, pero pedimos un plan de actuación para que el SAS asuma su propia cartera de servicios e incremente los recursos después del verano en todos los hospitales públicos para que esas listas sean eliminadas o aliviadas desde el propio sistema sanitario público y no utilizando a empresas privadas que son competitivas con nosotros porque usan la reforma laboral que tanto ha criticado el PSOE para abaratar costes». El sindicato insta al SAS a «comprometerse» a elaborarlo, puesto que ya habrán terminado las obras a las que se aferra la Junta para justificar en ocasiones el sellado de espacios y habrá «más profesionales disponibles» en la bolsa, «al no tener que cubrir ya todos los centros las vacaciones».

Otra de las demandas que plantea CC OO pasa por que se aligere «la resolución de las ofertas públicas de empleo del SAS». «Aún está pendiente, por ejemplo, la de 2013-2015. No se han publicado ni los listados provisionales en algunas categorías», lamenta Aparicio, lo que «genera insatisfacción» en unos profesionales que además tienen que lidiar con el «caos» surgido alrededor de «la ventana electrónica del concursante» a través de la que éstos han de subir su documentación académica y laboral sin que existan «suficientes ordenadores» en las unidades de atención al profesional para hacerlo y con un programa informático que «se cae constantemente», estrangulando paciencias.

Díaz regresa a escena

Cada vez más, el capital político va y viene al ritmo de revelaciones en los medios y las redes sociales que no paran ni en verano, acortando vacaciones. La presidenta de la Junta, la socialista Susana Díaz, ha optado por adelantar el final de su veraneo y recuperó ya ayer la agenda con la asistencia a una representación teatral en Fuente Obejuna (Córdoda). Sobre la mesa siguen, como estaban antes de su descanso estival, las reclamaciones y protestas ligadas al sector sanitario o la sombra del adelanto electoral en Andalucía. Es más, a éste se ha sumado ahora la posibilidad de que el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, también decida acelerar los comicios generales.