Valladolid

«No me cambio por un ministro y seguiré hasta cuando los vallisoletanos quieran»

Óscar Puente afirma a LA RAZÓN que el potencial de Valladolid es «enorme» y que espera tener tiempo «para sacarle jugo»

Óscar Puente cree que al comercio hay que apoyarle con equipamientos públicos en el centro de Valladolid
Óscar Puente cree que al comercio hay que apoyarle con equipamientos públicos en el centro de Valladolidlarazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@e4c5a58

Desde que accediera a la portavocía del PSOE de la mano del «resucitado» Pedro Sánchez, muchas son las voces que le sitúan en la política nacional a no muy largo plazo, y que incluso le colocan una cartera ministerial en un futuro gobierno socialista. Sin embargo, Óscar Puente se toma este asunto con cierta sorna y, en declaraciones a este periódico, parece tenerlo claro: «No me cambio por un ministro, ni creo que serlo sea más que un alcalde».

Y asegura que su compromiso con la ciudad es total. «Ser primer edil de Valladolid no es cualquier cosa y es mi máxima aspiración vital y profesional. Era lo que quería, lo que quiero ser y lo que espero seguir siendo. Y continuaré hasta que los vallisoletanos quieran». Si bien, tampoco se ve veinte años como su antecesor, y cree que dos mandatos más «serían suficientes» para acabar su proyecto de ciudad. Dice que Valladolid tiene un enorme potencial y que sólo espera tener tiempo para poder «sacarle jugo».

Puente acaba de cumplir dos años al frente del Consistorio vallisoletano. Un tiempo en el que destaca el cambio de estilo. «Veníamos de dos décadas de autoritarismo. De una forma de gobernar que trataba de imponer en lugar de convencer. Ahora, el Ayuntamiento está al nivel de los ciudadanos, no por encima de ellos. Somos noticia por el Plan de Retorno del Talento Joven, por el crecimiento turístico o por ser una ciudad viva, abierta y amiga, y no por las salidas de tono», señala.

«Catastrofismo» del PP

En las últimas fechas, el PP ha arremetido contra el Ayuntamiento, gobernado por el PSOE, con el apoyo de Valladolid Toma la Palabra y Valladolid Sí se Puede, la marca blanca de Podemos, al que acusan de falta de liderazgo, de tener la ciudad paralizada y sucia o de haber deteriorado los servicios públicos y desplomado la inversión. Puente niega la mayor y les echa en cara su oposición «catastrofista». «Desde la calle -dice- se ve con cierto asombro la actitud del PP porque el sentir general no es ese y los datos lo corroboran. Es más, mucha gente que se manifiesta votante del Partido Popular me ha dicho que está satisfecha con nuestra labor». «Aún no han encajado la derrota, y con esa actitud van camino de encajar otra mucho peor en dos años. Pero no seré yo quien les despiste», ironiza.

También destaca la tendencia «positiva» del desempleo pese al negro 2016 con cierres de empresas, como la emblemática Lauki, o reducciones de plantilla. «Valladolid es de las ciudades que más ha crecido en número de empresas en dos años», señala, a la vez que pone en valor que tenga los mismos 20.000 parados que al inicio de la crisis. «Estamos lejos de la situación ideal, pero si nos comparamos con nuestro entorno, vamos razonablemente bien», apunta. La situación del comercio del centro le preocupa pero recuerda que «ha habido momentos peores durante la crisis». Y muestra su apoyo total. «Hay que apostar por equipamientos públicos y dotaciones en el casco histórico, y por diversificar sus usos, que es lo que estamos haciendo. Porque si estos los sacamos fuera, como la Agencia Tributaria, el comercio se resiente». Y pone como ejemplo la Ciudad de la Justicia en el centro. Un proyecto urbanístico que está a punto de aprobarse y que el alcalde considera que , además de unificar las sedes y facilitar la labor a los ciudadanos y profesionales, dinamizará el casco histórico.

Puente acaba de firmar el acuerdo con Adif para integrar el tren en superficie. «Es lo más realista, lo que nos podemos permitir y mejoraremos la calidad de vida a los dos lados de la vía», apunta. Y aunque dice que no renuncia al soterramiento «si alguien lo paga», es algo que no ve viable, y tiene claro que el Ayuntamiento no puede pasar más tiempo sin intervenir. Además, este mes quiere resolver el conflicto de Auvasa, a cuyo comité de empresa echa en cara su «actitud obstruccionista», que «no sea consciente» de la situación por la que atraviesa la empresa, y que se «aferre» a un esquema de funcionamiento «obsoleto».

Erradicar las «infraviviendas» del polígono 29 de octubre; acometer los accesos al párking de la Plaza Mayor ; impulsar las escuelas infantiles en los barrios de La Pilarica, Delicias y Las Flores; o avanzar en los centros de mayores -el de Parquesol estará listo este año o a principios del que viene, asegura-, son algunas prioridades de su segunda parte del mandato. También sentar las bases del Parque Agroalimentario -este mes se aprobará el plan de viabilidad-, para comenzar las obras en la próxima legislatura.