Barcelona

Gastronomía suiza con producto natural y de calidad

La raclette y las fondues son los grandes protagonistas en el restaurante Basilea, que apuesta por una comida ritual

Las fondues de carne tienen un carácter ecológico y con productos de calidad
Las fondues de carne tienen un carácter ecológico y con productos de calidadlarazon

Está claro que la globalización ha llegado también a la gastronomía y que a día de hoy en ciudades como Barcelona se puede degustar la cocina de cualquier lugar del mundo. Es más, se ha producido un significativo incremento del interés y la curiosidad de los amantes de la gastronomía por conocer los productos y recetas de las culturas más diversas y lejanas. Y en este contexto, la calidad del producto y su autenticidad son las que marcan la diferencia y garantizan el éxito a los restaurantes de carácter temático.

Ese es el caso del Basilea, un establecimiento de cocina suiza, especializado en las famosas «fondues», tanto de queso como de carne, y las raclettes. «Nuestro gran valor es la calidad de los quesos que usamos, los cuales son 100 por cien naturales», asegura Àngels Pastor, propietaria del restaurante junto a su marido Stephan Fasnacht, de origen suizo, quien está al frente de los fogones. «Todos los quesos son traídos de Suiza, con denominación de origen, y no hay ni uno industrial», afirma la dueña del establecimiento, quien además destaca la gran variedad de fondues de queso que ofrece la carta, hasta 16 tipos diferentes: con ajos tiernos, con trufa, con colmenillas, cebollas caramelizadas, bacon, ceps... «Algunas de ellas son creaciones exclusivas nuestras», señala la propietaria del establecimiento.

Algo similar sucede con la fondues de carne, elaboradas a partir de un producto de primera calidad y de carácter ecológico, ya sea la carne de canguro, como el magret de pato o el solomillo de cerdo, así como la pechuga de pollo o el novillo, carnes que en el restaurante Basilea suelen ir acompañadas de salsas de elaboración y receta propias.

Como es de suponer, en un restaurante en el que la especialidad son las fondues, de carne o queso, y las raclettes, el concepto de compartir alcanza su máxima expresión. «Este tipo de comida es para compartir y conlleva un ritual. No se trata sólo de comer, sino que implica una convsersación, dedicar un tiempo a la comida, con tranquilidad, sabiendo que ésta no se enfriará», comenta Àngels, quien además destaca que los postres que ofrece la carta del Basilea también son dignos de mención. «Son todos tradicionalmente suizos y de elaboración propia, con productos de máxima calidad y de origen suizo, como los bombones de Läderach, el chocolate para fondue 100% natural o la tarta de nueces», comenta.

En este contexto y acorde con el concepto que defiende este restaurante, el Basilea desprende un carácter típicamente helvético. De reducidas dimensiones, el espacio luce paredes de ladrillo de las que cuelgan fotos e imágenes característicamente suizas, mientras que en una altillo sorprenden figuras características del Carnaval de Basilea de considerables dimensiones. Todo ello confiere al Basilea un carácter muy acogedor, el cual, unido al trato familiar y muy atento con el que los dueños acogen al comensal, hace que el cliente se encuentre en este restaurante casi como en casa.