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Vivienda

La vivienda cooperativa se abre paso en Barcelona

Ante los precios del mercado inmobiliario, cada vez son más lo que se interesan por el modelo de «covivienda»

En la actualidad, hay en marcha seis proyectos de cohabitación / Ayuntamiento
En la actualidad, hay en marcha seis proyectos de cohabitación / Ayuntamientolarazon

Ante los precios del mercado inmobiliario, cada vez son más lo que se interesan por el modelo de «covivienda».

Ante las dificultades del mercado inmobiliario barcelonés son muchos los que optan por echar mano de la imaginación y buscar soluciones alternativas. Una de ellas, la covivienda, ha ido tomando forma en los últimos años y comienza a dar resultados. No deja de ser una actualización del clásico cooperativismo pero aplicado a otro sector. La intención está muy clara: buscar alternativas para acceder al mercado de la vivienda, que hasta hace poco se reducía a dos opciones: alquilar o comprar.

La covivienda es una modalidad de vivienda muy extendida en el norte de Europa pero poco conocida por estos lares. Este modelo permite a una comunidad de personas vivir en un inmueble sin ser propietarios o arrendadores por un periodo largo de tiempo (de 50 a 100 años) y a un precio inferior al del mercado.

En este contexto, las cooperativas que trabajan en la construcción de coviviendas en la ciudad se reunieron el sábado pasado para compartir experiencias y mostrar sus proyectos a vecinos e hipotéticos interesados. El Ayuntamiente, consciente del problema habitacional de la ciudad, decidió fimentar este tipo de prácticas. Así, cede solares de titularidad municipal a cooperativas de vivienda para que estas puedan edificar con el objetivo, además, de fomentar la vida y la gestión comunitarias. Es decir, un suelo que se cede a cooperativas de vivienda, en derecho de superficie y por tanto que siempre conserva la titularidad municipal.

En la capital catalana hay en marcha seis proyectos de cohabitación, dos de ellos están en fase «muy avanzada y prácticamente acabados», según explicó el propio Ayuntamiento. Los otros cuatro proyectos «están a punto de comenzar las obras» en Barcelona, la única ciudad española con este número de proyectos impulsados en suelo municipal, añadieron.

Para estas plataformas, la cesión es «uno de los pilares fundamentales sobre los que levantar su proyecto, ya que conseguir disponer de solares para edificar es una de las inversiones más fuertes de un proyecto de vivienda», que en el caso de Barcelona tienen un valor económico de 10 millones de euros.

Los proyectos, sin embargo, tienen que prever criterios ambientales estrictos, una cantidad significativa de espacios que promuevan la vida en comunidad, el uso compartido de infraestructuras básicas y la corresponsabilidad de los usuarios en la gestión. Como por ejemplo,

LaCol, un colectivo formado por 14 arquitectos. En su caso, están desarrollando el proyecto arquitectónico de La Borda, una cooperativa de viviendas en cesión de uso. El edificio se ubicará en el antiguo recinto industrial de Can Batlló, en el distrito de Sants-Montjuïc, en un solar cedido por el Ayuntamiento de Barcelona.