Política

El desafío independentista

El Govern afronta otra «semana negra» con el paro de funcionarios y la pugna de los Mossos

El presidente de la Generalitat y el conseller de Interior ha dialogado sobre la actuación de los Mossos en Gerona y Tarrasa

Una protesta reciente del cuepro policial catalán, que pide más efectivos y que podría promover una oleada de bajas para sumarse al paro del 12-D»
Una protesta reciente del cuepro policial catalán, que pide más efectivos y que podría promover una oleada de bajas para sumarse al paro del 12-D»larazon

El Ejecutivo busca negociar «in extremis» con los trabajadores públicos para evitar la huelga del miércoles

El Govern de Quim Torra busca a toda costa evitar su segunda «semana negra» en menos de un mes y maniobra «in extremis» con los sindicatos para frenar la nueva huelga que la función pública ultima para el miércoles. Después del pulso de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) y del conflicto con los Mossos d'Esquadra, el Ejecutivo se plantea ahora satisfacer parte de las demandas de los trabajadores públicos para no encontrarse con otra protesta masiva en la calle. Su última oferta es recortar el plazo de retorno de las pagas extras de 2013 y 2014 que debe y no alargar su devolución hasta 2026, como había propuesto en un inicio.

En una entrevista de Europa Press, el conseller de Políticas Digitales y Administración Pública de la Generalitat, Jordi Puigneró, explicó ayer que su objetivo es llegar a un acuerdo con CCOO y UGT de Catalunya para que los dos sindicatos mayoritarios desconvoquen la huelga prevista . «Los trabajadores de la Generalitat tienen que poder cobrar cuanto antes mejor», remarcó el conseller, quien evitó concretar su propuesta y hablar de nuevos plazos.

En cambio, Puigneró sí recordó que su cobro está supeditado a la actual regla del gasto para las comunidades autónomas fijada por el Ejecutivo central. Por ello, pidió directamente a PSC y los «comunes» que presionen al Gobierno para que se modifique la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que determina dicha norma.

En la última Mesa General de la Función Pública, a finales de octubre, el Govern propuso a los sindicatos retornar las pagas pendientes de manera fraccionada hasta 2026, rechazando la opción de recuperar el 10% de la de 2013 en 2018, tal y como habían acordado ambas partes hacia un año con el anterior Govern.

En concreto, la oferta preveía que se devolviera la primera de 2019 hasta 2022, con el pago de un 10%, un 20%, un 35% y un 35%, respectivamente, y la segunda de 2023 hasta 2026, con el pago de un 25% anual. Una propuesta que llegó a los sindicatos a convocar la huelga del 12-D.

El paro, además, puede ser mucho más negativo para el Govern si se acaban sumando los Mossos de forma encubierta. Agentes del cuerpo están impulsando una campaña para que el mayor número posible de compañeros aleguen que están enfermos para no ir a trabajar durante la huelga a la que no pueden sumarse porque los policías no tienen ese derecho. Protestan por la falta de recursos y efectivos y la excesiva politización de un cuerpo en el punto de mira.

Las claves

La oferta del Ejecutivo es ir devolviendo las pagas pendientes hasta 2026, algo que los sindicatos mayoritarios rechazan

El consejero Puigneró habla ahora de «acortar los plazos» y pide al PSC y a los «comunes» que presionen con el techo de gasto y la Ley de Estabilidad Presupuestaria

El cuerpo policial catalán podría acabar promoviendo una oleada de bajas para sumarse al paro de la función pública y protestar contra la falta de recursos y la excesiva politización