Ayuntamiento de Madrid

Carmena le regala un abono transporte por su coche viejo

Se trata de una de las 26 iniciativas que el grupo municipal socialista ha logrado incluir en las cuentas del Ayuntamiento de 2018 en el total de 18 enmiendas pactadas con Ahora Madrid

Manuela Carmena, en una imagen de archivo / Efe
Manuela Carmena, en una imagen de archivo / Efelarazon

Se trata de una de las 26 iniciativas que el grupo municipal socialista ha logrado incluir en las cuentas del Ayuntamiento de 2018 en el total de 18 enmiendas pactadas con Ahora Madrid.

El Ayuntamiento de Madrid pondrá en marcha una experiencia piloto para animar a los conductores de los vehículos más antiguos y contaminantes a dar de baja su automóvil y mejorar así la calidad del aire de la ciudad. Como aliciente, proponen darles de regalo el abono transporte. Al margen de la inversión económica que tengan que hacer los propietarios de coches que no tengan el distintivo ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT), a propuesta del grupo socialista en el consistorio madrileño, se ha introducido una enmienda en los presupuestos para dedicar 600.000 euros a esta «oferta» para retirar los automóviles viejos.

En concreto, la portavoz del PSOE municipal, Puri Causapié, que ayer presentó junto a la alcaldesa Manuela Carmena el acuerdo para apoyar los presupuestos de 2018, explicó que con esta iniciativa pretenden que haya «un incentivo al uso del transporte público en la ciudad de Madrid, que permitirá reducir la contaminación provocada por los vehículos más antiguos, que son los más contaminantes». Sin embargo, Causapié reconoció que no han entrado al detalle de cómo se desarrollará este «regalo» a cambio del desguace de los coches sin etiqueta ambiental. «Es un proyecto piloto con un presupuesto inicial de 600.000 euros para ver cómo funciona y con qué criterios se pueden adquirir los abonos», añadió la portavoz.

Con esta cantidad el consistorio madrileño podría compensar con transporte público gratuito en la capital a 10.989 propietarios de coches durante un mes o bien a 1.098 conductores que renuncien a su vehículo contaminante durante un año si los abonos son anuales. A falta de subvenciones a vehículos eléctricos o híbridos que contribuyan a una mejor calidad del aire en la ciudad, al equipo de Carmena y sus pseudo-socios de Gobierno les ha parecido que los propietarios de coches sin etiqueta ambiental se animarán a invertir miles de euros en un nuevo coche o dejar para siempre la conducción a cambio de un abono gratuito.

Además, no se trata de una iniciativa original de PSOE y Ahora Madrid, sino que es una promoción que ya aplican varias ciudades europeas y españolas. Tal es el caso de París, donde la regidora Anne Hidalgo aporta desde 2016 una ayuda de 400 euros a quienes manden su viejo coche al desguace para que puedan obtener el abono transporte o comprar una bicicleta. Igualmente, pueden pedir un descuento del 50% en el abono del sistema de alquiler de vehículos eléctricos del consistorio parisino. En el caso de los profesionales que cambien su vehículo de empresa por un modelo eléctrico se les subvenciona con hasta 9.000 euros y el Estado otorga ayudas a los particulares que elijan cambiar a un automóvil de emisiones cero.

También en Barcelona, la alcaldesa Ada Colau entrega la denominada «tarjeta verde metropolitana» desde 2016 a aquellos vecinos que se deshagan de un vehículo contaminante a cambio del acceso gratuito al metro, los autobuses de TMB e interurbanos, el tranvía y el resto de los servicios ordinarios de transporte público de la zona 1, durante tres años. Eso sí la condición es que los beneficiarios se comprometan a no comprar otro automóvil en los siguientes seis meses a la baja del antiguo y, en caso de que después decidan volver a comprar perderán los privilegios de transporte público gratuito.

Más BiciMad

Esta no es la única medida que los socialistas han incluido en los presupuestos que votará hoy en el pleno municipal. También han reclamado el estudio y planificación de la ampliación progresiva del servicio de Bici-Mad a todos los distritos de la ciudad, así como la remunicipalización de la gestión de Calle 30, al respecto de la cual el concejal de Hacienda, Jorge García Castaño, avanzó que ya se había comenzado a hablar con el socio privado de la empresa de gestión de los túneles de la M-30.

El acuerdo que ayer presentaron Causapié y Carmena supone una desviación de 34 millones de euros del presupuesto municipal que asciende a 4.769 millones de euros para este año. Según explicó la portavoz del PSOE, los cambios se han sustanciado en 26 medidas, si bien algunas han sido transaccionadas, y afectan a cuestiones como el apoyo al movimiento asociativo, la reducción del copago en los servicios de los centros de día y atención a personas mayores, impulso al plan de rehabilitación de viviendas y aumento de la cooperación al desarrollo, entre otras. La portavoz del PSOE reconoció que gran parte de las medidas incluidas en los presupuestos forman parte de las acordadas el pasado año para las cuentas de 2017, si bien justificó en las exigencias del entonces ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que el Ayuntamiento hiciese un Plan Económico Financiero –porque no cumplieron con la regla de gasto de forma reiterada–, el retraso en la ejecución de las medidas que habían condicionado su apoyo.

En este sentido, tanto Ciudadanos como el PP criticaron que, frente a los más de cien millones de presupuesto que desviaban las enmiendas socialistas el pasado año, este año Causapié «regala» las cuentas a Carmena. «El PSOE es la facción más obediente que tiene Ahora Madrid», apuntó la portavoz de Cs, Begoña Villacís, que apostilló que la alcaldesa ha tardado menos tiempo en ponerse de acuerdo con los socialistas que con el resto de facciones de conforman Ahora Madrid. Igualmente, el portavoz del PP, José Luis Martínez-Almeida, la aprobación de los presupuestos municipales de la capital forma parte del «conjunto de pactos» en función de los cuales Pedro Sánchez es presidente del Gobierno, que le ha devuelto el favor así a Pablo Iglesias.